La llegada de Pepe Mel ha significado el despertar para el vestuario de la UD Almería, los jugadores levantan la cabeza, miran a la cara a su entrenador y a todos los que le rodean. Han bastado pocos días para que los jóvenes tomen nuevo protagonismo y los pesos pesados del equipo den un paso al frente de la mano del técnico madrileño.
Sabe Mel que las claves del éxito en el vestuario y cuenta con todos para levantar el vuelo y que el equipo abandone para siempre ese estado de depresión que le hizo entrar en barrena. Los cinco capitanes: Fernando, Chumi, Embarba, Robertone y Melero, cuentan para la causa y en ellos se apoyará el entrenador para conseguir ese plus en cada partido que les haga crecer en Primera y acercarse a la salvación pese a que todos entienden que es un tema que no se contempla para ir mejor semana a semana.Sin hacer cuentas, en el vestuario la capitanía pesa mucho desde la llegada de Pepe Mel, que sabe manejar los egos de los vestuarios y dar al titular y al suplente su debido protagonismo.
Lo primero que hizo Mel al entrar en el Almería fue levantar la moral de los profesionales y les habló del privilegio de competir en Primera. Su mensaje llegó a unos futbolistas en estado de depresión que volaron a Las Palmas convencidos de que iban a cambiar el rumbo. Pasan muchos días juntos y las penas como las alegrías se comparten y nada mejor que tener a su lado a los capitanes para que su mensaje vaya llegando a todos los rincones del vestuario. El éxito del Almería que pretende Pepe Mel pasa por el buen rollo y a lo largo de su carrera los equipos que ha dirigido han tenido grandes capitanes que le hicieron más fácil su labor.
Peso
A lo largo de su carrera deportiva el entrenador madrileño ha sabido controlar a los jugadores. Se ha sabido rodear de buenos jugadores y de buenas personas y cuando ha llegado con la temporada iniciada y sin haber tenido mano en la confección de la plantilla sabe tocar las teclas para que los capitanes se sientan importantes y sean los pesos pesados en el equipo. Hombres como Fernando, Chumi, Embarba, Robertone y Melero saben lo que significa el triunfo y la derrota como conocen como nadie dónde está la clave del éxito.
Decisión
Contar con un vestuario unido es algo que no se negocia. El éxito radica en tener a los jugadores enchufados y la victoria en Las Palmas ayuda a la hora de cambiar la cara de los profesionales que lo han pasado muy mal desde que comenzó la temporada y parece que todo va a cambiar con la llegada de un entrenador que sabe decidir con el apoyo de sus capitanes. Dar galones desde el primer momento a los capitanes.
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