Pepe Mel quiere otra pastilla

Los abonados del Almería andan locos por saber lo que les espera. A ellos y al club de sus amores porque el descenso matemático ha dejado las ilusiones por los suelos y al club aletargado. Solo ha trascendido esa Liga de diez partidos de Pepe Mel que ha atravesado el ecuador y afronta el sexto partido con más pena que gloria y sabiendo el entrenador que su mensaje no ha llegado al vestuario y por mucha liberación de tensión que les pidió y por aquello de jugar como niños todo ha terminado mal para el equipo y para un entrenador que sabía donde se metía. Faltan cinco partidos para acabar su contrato y luego ya se verá pero nadie sabe lo que viene. Nadie puede asegurar lo que hay después de Pepe Mel y toca trabajar como profesionales y esperar noticias del club porque las de LaLiga ya las saben de memoria profesionales y aficionados. En esa Liga de los diez partidos que está en su ecuador hay en el haber del madrileño haber sacado a un niño del filial, ganar un partido y jugar bien ante el Villarreal. Poco más ha aportado el entrenador madrileño a un equipo herido de muerte que tiene la cabeza en otra cosa y no se va a levantar en las jornadas que quedan porque no atienen a los técnicos sean jóvenes o veteranos. Lo individual ha primado a lo colectivo y por ello se ha perdido la categoría. El entrenador madrileño hizo lo que pudo y se merece otra pastilla (foto compuesta para redes sociales) anunciando su continuidad.

Toca cumplir con el calendario y competir con dignidad para no adulterar la competición. Hay que aplaudir a Pepe Mel que lo intentara como sus antecesores en el cargo pero es que cualquier entrenador esta temporada está abocado al fracaso por el bajo rendimiento de una plantilla que siendo la más cara de la historia del club no ha dado la talla. El club ha tomado nota y tratará de rectificar pero habrá salidas dolorosas. En esa Liga de Mel ya le saca diez partidos de ventaja al entrenador que venga.

Escuchen a Mel

Si el Almería quiere corregir y taponar la vía de agua que se abre con este descenso que hable con Pepe Mel. Que se encierren en el despacho el director deportivo y el entrenador y pasen revista a la plantilla- Pepe Mel conoce los males del equipo y lo que le puede aportar en el futuro cada jugador. Salta a la vista que conoce el paño pero otra cosa es que sea el elegido para dirigirlos. Si se apuesta por él ya tiene mucho ganado el Almería porque sabe lo que falta y todo lo que sobra (que es mucho) en el vestuario. Escuchen a Pepe Mel que hará un diagnóstico del equipo porque en su Liga particular ya se la ha pegado con unos futbolistas que están para otra cosa. Lo ha intentado como padre y como sargento de semana y no hay manera. No hay perfil de entrenador que pueda dirigir a esta plantilla pero la palabra de Pepe Mel vale mucho.

Palabra de Joâo

Cuando todos los dedos apuntan al director deportivo hay que ponerse la mano en el corazón y recordar cuando Almería entera aplaudía cualquier fichaje que se realizaba. Todos sus fichajes eran aciertos antes de verlos en acción y con más de 50 millones de gasto lo normal era acertar pero se la pegó el hombre que tanto acierta. Joâo Gonçalves firmó lo mejor para una temporada de tranquilidad y ha visto caer a su equipo hasta la Segunda División. Él también tiene sus informes y en su Liga de 38 partidos habrá suspensos y medidas drásticas porque hubo jugadores que en nada se parecieron a aquellos por los que apostó el Almería. Hay mucha faena en la dirección deportiva y todo comienza por elegir bien al nuevo entrenador y escuchar a Pepe Mel que seguro dará un diagnóstico sobre los males del Almería.

Pepe Mel le saca diez partidos al que venga.