Por qué no firma Rubi el contrato de su vida

El entrenador candidato al banquillo del Almería ha pedido tiempo a Turki antes de tomar una decisión para firmar el mejor contrato de su vida, a la espera de una llamada de Primera División que se antoja complicada ya que solo quedan tres equipos de la máxima categoría sin entrenador. Osasuna ya es pasado para el técnico catalán y salta la lista a Las Palmas, Real Mallorca, Sevilla y Rayo Vallecano. Son solo tres banquillos vacantes pero con condiciones ya que en Mallorca es Arrasate el mejor colocado para sustituir a Javier Aguirre. En las Palmas se busca un entrenador emergente para suplir la baja de García Pimienta y el Rayo no lo tiene claro con la continuidad de Iñigo Pérez. Lo del Sevilla requiere unos riesgos que igual no estaría dispuesto a sumirlos el firme candidato al banquillo del Almería. El tiempo que pide Rubi a Turki Al-Sheikh estaría en función de alcanzar el banquillo de uno de los clubes que están buscando relevo y no parece ser Rubi el mejor colocado a día de hoy. No se entiende que el preparador catalán se lo tome con calma ante el contrato de su vida. Turki no es de los que le gusta esperar pero tendrá tacto con el catalán ya que tiene buena sintonía con él y ha sido el elegido. El catalán lleva la Primera en la cabeza y lo mismo no sale bien firmar en Segunda con el Almería por aquello de las segundas partes y la presión que acarrea dirigir al club rojiblanco.

El tiempo que pide Rubi al Almería juega a su favor ya que si alguno de los clubes de Primera le contratan igual sacrificaría dinero de Arabia por regresar a LaLiga. Es una decisión firme la del catalán que no parece inquietarle el poder económico del Almería y prefiere ser fiel a su decisión meditada a lo largo de toda una campaña viendo fútbol de Primera y menos de Segunda. Entrenar al Almería tiene sus riesgos y pese a que Rubi cobraría todo lo firmado, prefiere el catalán estar plenamente convencido antes de dar el OK.

Espera

Lo único claro a día de hoy es que Rubi es el entrenador pretendido por el Almería y que el catalán prefiere dirigir en Primera. Solo quedan cuatro banquillos libres y no ha sonado para ninguno de ellos. Los equipos sin entrenador tienen otros planes y lo mismo en los planes del catalán está lograr llamar la atención de estas entidades y que llegue una buena oferta para entrenar en Primera. Hay mucho en juego para Rubi a la hora de tomar una decisión y está en su derecho de tomarse tiempo por si llega la llamada de un Primera División.

Dinero

Queda claro que en la decisión de Rubi está por encima de todo el proyecto deportivo. El dinero no es lo principal ya que el Almería le ha valorado como si de un entrenador de Primera División se tratase y le pone encima de la mesa un contrato irrechazable. Nunca antes le han ofrecido tanto dinero al catalán por dirigir a un club y pese a ser irrechazable la oferta se lo quiere pensar ya que las segundas partes en los clubes no siempre salen y se le va a exigir mucho desde la primera jornada y se le va recordar todo lo que firme.

Exigencia

Si el catalán no ha dado aún el visto bueno a la oferta del Almería es por lo que implica entrenar a un club como el Almería. No es uno más de LaLiga y pese a que le darán galones para elegir a futbolistas (no todos) desde que firme su contrato tendrá todo el peso de la responsabilidad y la obligación de alcanzar un nuevo ascenso a Primera División. Entrenar en Almería no es tan bonito como parece y lo sabe de primera mano el entrenador catalán que pese a tener encima de la mesa el contrato de su vida, sabe que en fútbol nada te garantiza repetir éxitos pasados. 

Se juega mucho Rubi en su decisión.