“Pude despedirme de mi madre y ella quiso que estuviera en Almería”

Repasando la trayectoria de un Rubi centenario en la UD Almería aparece un capítulo triste. La temporada 2021-2022 fue exitosa en términos generales por el ascenso a Primera División, si bien el preparador catalán tuvo que afrontar el fallecimiento de su madre, Mili Sicilia. Lo llevó muy en secreto para que afectara lo menos posible a su cuerpo técnico y al vestuario. Ocurrió el 4 de febrero de 2022 pocas horas antes de que el equipo venciera 2-0 al Ibiza UD en casa con goles de Largie Ramazani y Umar Sadiq. Precisamente los jugadores no sabían nada de lo que había sucedido hasta después del encuentro.

Dos años más tarde Rubi cuenta cómo supo gestionar una situación tan dura en lo personal para que afectar lo menos posible al rendimiento de la plantilla del Almería: "Cuando mi madre estaba en una situación muy crítica yo solo se lo comentaba a una persona del cuerpo técnico. Una vez tuve que ir sí o sí a casa porque parecía que podía ser el final. Luego estiró un poco el poder vivir y yo intentaba que el futbolista no se preocupara por mí. Es cierto que en el Almería-Ibiza mi madre falleció ese mismo día, y yo ya me había podido despedir de ella y mi madre quiso que yo estuviera en Almería dirigiendo al equipo. Ella me lo puso muy fácil".

El club

"El Almería está de luto por el fallecimiento de Mili Sicilia, madre del entrenador del primer equipo, Rubi; un triste desenlace que conoció el técnico cuando se encontraba en la concentración previa al partido frente a la UD Ibiza. Sin embargo, no quiso comunicar nada hasta una vez concluida la confrontación, momento en el que recibió el cariño y el apoyo de todos los jugadores, miembros de su cuerpo técnico, directivos empleados de la entidad rojiblanca…", informó el club en un comunicado.

Su casa

Y es por ello que Rubi siente Almería como algo más que un destino laboral. Quiere hacer una larga carrera -al menos tres campañas- para llevar al club a Primera y consolidarlo entre los mejores. Un mal inicio se puede aceptar siempre y cuando todos se pongan las pilas y saquen de una vez la calidad para salir de los puestos de descenso: "Me duele más que nunca esta situación. Llegué con mucha ilusión para cambiar la tendencia de resultados en nuestro club y me genera dolor que tengamos que pasar una situación difícil. Eso sí, esto se puede dar en Segunda División y más cuando vienes de Primera, aunque yo quería que no nos tocase a nosotros. Sí que es una fuerza interna que no me permite venirme abajo ni un solo segundo. Por muy mal que hayan salido algunos partidos mi estado de ánimo no ha bajado nada".

Rendimiento

Por último, indica que el Almería sin personalidad de Oviedo choca frontalmente con el que se exige y supera al Burgos incluso en inferioridad. Rubi ha visto picos de rendimiento muy altos, pero durante poco tiempo, y la única palabra que le ronda por la mente es la regularidad: "Me preocupa poco la clasificación y mucho la irregularidad en la que estamos. Cuando el Almería llega a picos altos de rendimiento te das cuenta de que si lo mantenemos somos un equipo muy fuerte, como dicen nuestro rivales, pero a su vez tenemos otra cara, y nos sorprende, que es la vulnerabilidad. Hay que cerrar el grifo y entonces ganaremos dos o tres partidos seguidos".