Juan Jiménez, el extremo de las medias caídas del Atlético Almería

Durante diez largos años llevó el número 11 en la camiseta del Almería. Juan Jiménez Leal, el extremo izquierdo rojiblanco que nunca uso espinilleras y llevaba las medias caídas, nació en la capital el 19 de diciembre de 1932. Vino al mundo en su casa de la calle Magistral Domínguez, donde se crio y creció jugando al futbol con los niños de su calle. Como casi todos los niños que apuntaban maneras y despuntaban de aquella generación de los años cuarenta, fichó por el potente Ancora hasta que un ojeador del Almería se fijó en el espigado y veloz muchacho. Su velocidad por la banda y su precisión en los centros fueron los elementos utilizados por Juan Jiménez para hacerse de inmediato con un hueco en el futbol almeriense.

Siendo juvenil fue seleccionado para jugar con la selección de Andalucía evidenciando su clase y sus singulares sprint por la banda. En la primavera del año 1950, Casimiro Benavente lo llevo a probar al Real Madrid, unos meses antes de que “La Galerna del Cantábrico” Paco Gento llegase a la entidad blanca. Jimenes estuvo quince días por tierras madrileñas, pero las cosas no salieron bien. En esos años, por allí ya estaba otro almeriense, Antonio Serrano integrado en el primer equipo, pero el club blanco posteriormente lo cedería al Málaga, donde el paisano sufrió una grave lesión que le apartó definitivamente del futbol profesional.

Trayectoria

Juan Jiménez, debutó como profesional a puno de cumplir los 18 años en la denominada entonces Copa del Generalísimo en un partido frente al Antequerano.  Pronto, en la temporada 1958 se convierte en un valor activo cuando el Atlético Almería alcanza por primea vez el ansiado ascenso a la categoría de plata del futbol español. Al espigado Juan Jiménez el amargo trance del descenso a la siguiente temporada no le pilla ya en las filas rojiblancas. En 1959 ficha por el Cádiz que milita en Segunda División. Un par de temporadas con el equipo cadista y la nostalgia le hace retornar de nuevo a la capital.

Juega en el Almería, ascendiendo a la Tercera División, donde cuelga las botas y se retira a los 33 años. La vida profesional ya la tiene marcada, vinculado al sector de la Medicina como visitador médico. Hombre amable y con un gran sentido de la amistad,  recuerda superados los noventa años grandes pasajes de su vida deportiva como  miembro de aquella delantera mítica del Atlético Almería y su eléctrica delantera formada por Liz, Quintín, León, Pepe Giménez y Juan Jiménez, casi nada.

No tiene duda en señalar al paisano Antonio Serrano, como el mejor jugador que ha conocido de todos los tiempos, aunque tiene grandes elogios para otros futbolistas que compartieron con él vestuario. Por muchos años, don Juan, cumplidos los 92 mucha salud y felicidades por la efeméride.