El recambio perfecto

Uno de los fichajes estrella de 2022, llegaba procedente del Partizán de Belgrado con tan solo 18 años y con unas aptitudes físicas que deslumbraban. Marko Milovanovic se presentaba en Almería como el posible sustituto de Umar Sadiq, a pesar de no haberse marchado, el Almería ya contaba con la salida del astro nigeriano y así fue. Es cierto que Milovanovic no venía para dar un rendimiento inmediato, más bien era una apuesta de futuro, de todas formas se esperaba verlo jugar en Primera División y que fuese rodándose, pero una lesión en el pubis le impidió sumar más minutos en la liga de las estrellas, por ello, el Almería que no andaba muy bien con el Fair Play financiero decidió dar de baja su licencia en la 22/23.

Remplazo

La presión por ocupar el puesto de delantero titular en un equipo de Primera División le pasó factura. Reemplazar a Luis Suárez era una tarea titánica, y las críticas tras cada actuación afectaron a su confianza. La falta de apoyo desde la grada, donde cualquier error generaba un runrún, tampoco ayudó. Con el descenso del Almería, se esperaba que Milovanovic tuviera más minutos, pero hasta ahora solo ha aparecido en partidos prácticamente resueltos para dar aire a Luis Suárez.

Rubi, consciente de sus capacidades, optó por darle protagonismo en la Copa del Rey. Aunque sus actuaciones contra equipos como el Sanse y la Cultural Leonesa dejaron destellos de sus capacidad, su rendimiento fue irregular. Sin embargo, en el último enfrentamiento copero, todo cambió.

Punto de inflexión

Ante un equipo de Primera División, Rubi confió en Milovanovic desde el inicio. A pesar de que el Almería se fue al descanso en desventaja, el delantero serbio dejó muy buenas sensaciones. Fijó a los centrales rivales, facilitó el juego para sus compañeros, sobre todo a Luis Suárez que recibía con solo un defensor y tuvo una oportunidad clara en la primera mitad, aunque el disparo se marchó desviado, ya que se escoró demasiado.

En la segunda parte, todo apuntaba a que sería sustituido, especialmente tras recibir una tarjeta amarilla en un partido donde el árbitro, Busquets Ferrer, mantenía un criterio muy estricto ante el conjunto local. Sin embargo, Rubi decidió mantenerlo en el campo, y Milovanovic aprovechó al máximo esos minutos adicionales consiguiendo un golazo para igualar el encuentro y dando el pase del gol de la remontada.

Confianza 

Con esta actuación, Milovanovic parece haber recuperado la confianza, un factor fundamental para cualquier jugador. Este ejemplo recuerda a la transformación que vivieron jugadores como Pozo, Chumi o Fernando bajo el mandato de Rubi, un entrenador que no solo saca lo mejor de sus futbolistas, sino que también los motiva a creer en su potencial.

La explosión del delantero serbio llega en un momento crucial para el Almería. En un mercado invernal donde el club prioriza reforzar la posición de pivote defensivo y central, la irrupción de Milovanovic en ataque podría permitir al equipo destinar más capital a estas áreas que actualmente son mayormente prioritarias. Con la reciente llegada de Lázaro y el resurgir del 'gigante serbio', el Almería parece tener bien cubierto su frente ofensivo.

La prioridad es el pivote.