La actual corporación municipal de Alcudia surgió de las elecciones municipales de 2011. Su propuesta ya entonces fue la de servir de revulsivo a un pueblo muy pintoresco de la Sierra de Los Filabres. Un pueblo que como los vecinos pueblos de las estribaciones de esta Sierra (Senés, Tahal, Benitagla y Benizalón) a partir de la década de los 60 se iban quedando dormidos debido a la emigración y posterior despoblación. Si lo pensamos fríamente era lógico ya que esta zona era muy difícil el futuro para los hijos de los alcuzarros. Pero, no obstante, el municipio trabajo muy duro con vistas al futuro.
Retos
Estos pueblos, en un aislamiento sempiterno, habían tenido siempre una economía de subsistencia siendo todos sus productos los llamados hoy ecológicos, construyendo sus pocos bienes y manufacturas con las ofrendas que les otorgaba la naturaleza de la zona, urdidas con vivaz ingenio. Nunca fueron pueblos con una actividad económica solvente.
Todo esto que les supuso un gran trabajo y sacrificio a los antepasados de los ciudadanos de Alcudia de Monteagud y que, sorpresivamente, ha pervivido hasta nuestros días, es lo que tenemos hoy día como valor primordial.
Vivienda
La normativa municipal en materia de construcción y reformas de viviendas que fomentan en los últimos años, ha dado sus frutos y actualmente gozan de un pueblo con casas blancas de cal y rojo de teja y calles trazadas a la hechura musulmana de los moriscos que en su día las habitaron. Este es su patrimonio y este es, a su entender, el futuro del pueblo. Además, están volcados en poner en valor todo el patrimonio de cara a incrementar el turismo rural, máxime cuando España es un destino turístico por excelencia y donde, en 2019, supuso un 12% del Producto Interior Bruto (PIB). Durante estos años, en Alcudia, han tratado de posicionarse en este sentido acometiendo las infraestructuras y servicios más prioritarios: embellecimiento de calles, uniformidad de construcciones y reformas de viviendas o creación de varios aparcamientos públicos.
Juan Blas Martínez Sánchez: Una vida dedicada por completo a su tierra
Mucho tiene que agraceder el municipio de Alcudia de Monteagud a Juan Blas Martínez Sánchez, regidor del pueblo durante los últimos 10 años y que el pasado mes de julio cedió la vara de la Alcaldía debido a cuestiones relacionadas directamente con su salud.
Durante su mandato, Juan Blas trabajó por y para su pueblo, dejando a la actual corporación el camino marcado para que el presente de Alcudia de Monteagud sea la base sobre la que se cimente el futuro de un pueblo con mucho patrimonio histórico. Sirvan estas líneas para mostrar a Juan Blas el cariño de todo el pueblo y su afecto.
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