Fueron muchos los comercios no esenciales que tuvieron que cerrar sus puertas durante los momentos más críticos de la pandemia, y los que permanecieron abiertos, aún así, vieron descender su actividad hasta niveles extremos debido al miedo de la población y a las restricciones impuestas que les obligaban a cuidar el aforo y a cerrar antes de lo habitual. El Ayuntamiento de Sorbas sabe que sin economía no hay futuro y, por ello, está centrando sus esfuerzos en ayudar a los negocios de la localidad a salir adelante para que el tejido comercial no se resienta y siga estando tan activo como antes de la llegada del coronavirus.
Por eso, en diciembre arrancará la segunda edición del programa ‘Conociendo Sorbas, creciendo juntos’, un plan de dinamización del comercio local que pondrá en circulación un total de 12.000 euros en bonos para consumir en el propio comercio sorbeño y reactivarlo. Además, habrá muchos más regalos entre quienes participen.
Funcionamiento
Se trata de una original propuesta que conjuga el fomento de compras y servicios en el municipio incentivado con la posibilidad de obtener cartas de colección que completan un juego de cartas tradicional ‘Conociendo Sorbas’.
Las cartas coleccionables se consiguen con un mínimo de compra de 5 euros y dispondrán, en su parte principal, de toda la información mencionada, acompañada de una ilustración o foto. En el anverso, común para todas las cartas de la colección, los participantes encontrarán un rasca donde podrán averiguar si se trata de una de las más de 1.000 cartas premiadas con bonos para consumir en los diferentes comercios adheridos al plan.
Entre todos los participantes que consigan reunir las 48 cartas de la colección y que se hayan registrado en las oficinas del Ayuntamiento de Sorbas se efectuará un sorteo de dos lotes de vales de compra que estarán valorados en 500 y 1.000 euros, respectivamente.
La campaña incluye, además, una exposición itinerante con murales que viajarán por dependencias municipales, colegios y comercios a lo largo de los más de tres meses de duración que tiene previsto prolongarse. En la recta final de la campaña se realizarán actividades en el colegio para involucrar a los más pequeños en el conocimiento de la historia y actualidad de Sorbas.
Se espera que sean muchos los vecinos de la localidad que se sumen a esta iniciativa que, además de ayudar a los negocios locales, tiene un componente de ocio y diversión como es el de completar toda la colección de cartas. La experiencia dice que los vecinos se volcarán en este juego, tal y como han hecho en ocasiones anteriores con otras campañas de un perfil similar.
Se trata de una iniciativa más para apoyar a los comercios y que busca que el futuro del municipio se vislumbre con optimismo por parte de aquellos que componen el tejido empresarial de Sorbas, y es que sin ellos se antojaría muy complicado pensar en un panorama próspero para la localidad.
La artesanía, oficio ancestral del municipio
Encaramada a un barranco de 40 metros de altura, Sorbas posee una tradición única en la provincia. El barrio de Las Cantarerías es conocido por la alfarería que siempre se ha desarrollado en él, un oficio que, aunque hoy se está perdiendo, continúa muy vivo en la localidad. Pasear por este enclave supone viajar en el tiempo hasta aquella época en la que los alfareros elaboraban cántaros de una calidad excelsa. De hecho, aún se pueden contemplar a algunas personas faenando estas piezas de la misma forma que lo han aprendido y ha ido pasando de generación en generación. Según un estudio de la Sociedad de Amigos de Sorbas, uno de los alfareros es descendiente directo de los primeros repobladores que llegaron al municipio después de la Reconquista de estas tierras por los Reyes Católicos. En la zona se pueden visitar los oficios de los alfareros, ver cómo trabajan el barro y seguir el proceso de las piezas hasta los hornos, de los que quedan dos llamados tipo árabe. Una antigua fábrica de lana y un molino harinero componen el Museo de la Lana y una almazara hoy convertida en bar completan la visita por este artesanal barrio.
Juan José molina gonzález: El pueblo no olvida al que fuera 25 años concejal
Hace poco más de un año que un desafortunado accidente al caer al suelo desde el techo de una almazara le costaba la vida a Juan José Molina, concejal por aquel entonces del Ayuntamiento de Sorbas. Fue todo un shock para el municipio, que se sumía en un profundo luto por esta persona que dedicó 25 años al servicio de los sorbeños en el Consistorio local. Empresario del mundo rural, era gerente de una almazara en la barriada de Gafarillos, amigo de sus amigos y amante de su familia, Juan José era mucho más que un concejal para el pueblo. Era un amante de Sorbas, de sus costumbres, de sus tradiciones, de su patrimonio y de su cultura, siendo un gran impulsor de muchas iniciativas de interés para el pueblo que lograban dinamizarlo y atraer visitantes. Pero también era una persona que siempre estaba dispuesta a ayudar a quienes lo necesitaran, independientemente de que estas labores excediera sus funciones como concejal. Eso no le importaba. Por eso, hoy y siempre se le seguirá recordando en el municipio.
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