La cocina con más arte que triunfa desde hace cuatro años en Cortijo Grande

Desde que nació en abril de 2019, Cocinarte no ha hecho más que crecer en el barrio de Cortijo Grande gracias a su apuesta por una comida para llevar de calidad, sobre todo tradicional, pero también con un toque moderno e internacional. 

La filosofía del negocio, situado en la calle Lentisco, la resume su propietaria, Lorena Massanet García: “Cocinamos como en una casa de toda la vida”. Esto no quita para que también ofrezca platos típicos de la cocina italiana, marroquí, china o hindú, en ese interés por fusionar lo tradicional almeriense con lo exótico de otros países. Y tampoco quita, claro, para que el plato estrella, el más demandado sin duda de Cocinarte, sea también la receta más emblemática y popular de Almería: el trigo.

Buena parte de culpa de este éxito, tanto del trigo como de otros muchos platos de cuchara y de Almería de siempre la tiene también Mari Carmen Gázquez, que es la cocinera titular desde el primer día, y quien “pone el corazón en absolutamente todo lo que hace”. Sus cocidos y platos de cuchara, como la berza o los potajes -este mismo lunes se quedaron sin existencias de su potaje de Semana Santa, con bacalao, espinacas y huevo- son conocidos no ya solo en Cortijo Grande, sino en toda la capital y su extrarradio.

“Tenemos clientes que vienen de otros barrios e incluso de pueblos cercanos, como Viator”, asegura Massanet, quien también ejerce de cocinera. Ambas, tanto la propietaria como Mari Carmen, son autodidactas, pues no se han formado en escuelas ni academias de hostelería, pero que en cambio cuentan con una amplia experiencia desde muy jóvenes.

Desde los 16 años

Lorena empezó a trabajar a los 16 años en una pizzería y desde entonces no ha parado. Antes de Cocinarte se ha formado en bares del centro de Almería, en un local de Retamar del que fue jefa de cocina y en un restaurante de Roquetas de Mar ya cerrado del que aprendió recetas de platos experimentales con un toque oriental e internacional.

La máxima responsable de Cocinarte dice ahora, cuatro años después y tras una excelente acogida, que el secreto del éxito está en buena medida en la variedad: “Todos los días intentamos sorprender a nuestros clientes, sacar cosas nuevas, no aburrir, porque hay muchas personas que vienen todos los días”, dice.

Donde no hay sorpresas es en el formato tipo del producto, que no es otro que el menú del día, con un precio actual de 7,95 euros y formado por dos platos y un postre -entre éstos también algunos caseros típicamente almerienses, como las talvinas, una especie de gachas dulces-, una bebida, pan o una miniensalada, que también ha sido todo un acierto de la empresa.

Entre los platos del menú también cuenta con recetas de dieta keto o cetogénica -alta en grasas saludables, baja en carbohidratos y moderada en proteínas-, e igualmente ofrece un plato fitness, a un precio de 5,75 euros, elaborado con ingredientes en general de aún mayor calidad, entre los que pueden encontrarse mariscos, por ejemplo. 

Al margen, además, de raciones de todo tipo también muy demandadas, aunque nunca tanto como su menú. “En cualquier caso, apostamos por la calidad ante todo, y por ejemplo cocinamos todos los guisos con aceite de oliva virgen extra”, afirma. 

Abierto de lunes a sábado, Cocinarte anuncia desde las 15,00 horas de cada día el menú del siguiente, para que sus clientes puedan reservarlos, tanto por whatsapp, como por teléfono o en la tienda. Y cada día, desde las 6,30 horas se encienden los fogones para que durante toda la jornada puedan ser recogidos por el cliente. “Gracias a dios, nunca nos sobra comida”, dice con satisfacción Lorena Massanet, quien comenzó en 2019 con solo tres personas más en plantilla y que hoy dirige ya un amplio y próspero equipo formado por 11 mujeres.