“Me siento muy orgullosa de ser matrona y de ser almeriense”

Todas las mujeres son reinas, decía orgullosa, la protagonista del Premio Gente de la noche. Ella es Pilar Giménez Lalanza, quien durante casi 42 años ha ejercido como matrona.

Es una mujer fuerte, con mucha energía y que considera que su profesión es la más bonita del mundo porque no existe nada más bonito que ayudar a traer una vida al mundo.

42 años

En estas más de cuatro décadas ha ayudado a miles de mujeres a dar a luz, quizás a alguna de las que se dieron cita la noche del jueves en el Auditorio Maestro Padilla de la capital para asistir a la décima edición de los Premio Almería de La Voz de Almería, y como su padre le decía, a todas las ha tratado con el máximo cariño, respeto y como a auténticas reinas. 

Es madre de cuatro hijos y abuela de dos preciosas nietas a las que ella ayudó a nacer. Todos los partos son diferentes porque ninguna mujer actúa igual, pero todos los recién nacidos son, asegura, preciosos. Y es que a todo le ve el lado positivo de lo que significa nacer. “Si un bebé nace con un pie algo torcido, no importa, será bailaor”, contaba.

Trayectoria

Aunque en el paritorio también se pasan momentos de estrés y algún que otro mal momento adora lo que ha hecho durante toda su vida laboral. Ha pasado por la Bola Azul, Torrecárdenas, la Virgen del Mar y estrenaba el nuevo hospital Materno-Infantil de Torrecárdenas. 

Los partos han cambiado mucho a lo largo de sus años como matrona, donde en algunos turnos se ha encontrado con hasta 22 parturientas, pero en todos existe un factor común: la vida.

El premio

Por su labor y aporte a la Sociedad  recibía el Premio Gente. Al dirigirse a los asistentes, afirmando encontrarse “abrumada” y con la voz quebrada por la emoción concluyó sus palabras enfatizando que “me siento muy orgullosa de este premio, de ser matrona y de ser almeriense”. 

Un galardón que levantaba orgullosa sobre el escenario desde donde se dirigía con su mirada a su familia, que no dudó en acompañarla en un día tan importante en el que recibía el premio de manos de José María Martín, subdelegado del Gobierno en Almería.