Por qué deberías comprarte una cámara si te gusta la fotografía

Los teléfonos móviles han sustituido a multitud de dispositivos que nos hacían la vida más fácil. Ya no necesitamos tener un reloj para poner la alarma o una calculadora física para hacer cálculos. Pero, por encima de todo, la sustitución más famosa ha sido la de los móviles a las cámaras de fotos. Estos dispositivos siguen siendo habituales entre los fotógrafos profesionales, pero son cada vez menos frecuentes entre el público aficionado. Cada vez se crean móviles con mayor calidad fotográfica, pero, ¿pueden estos móviles sustituir a las cámaras? La OCU, en su artículo, nos cuenta las ventajas de hacer fotos con cámara.

Es cierto, debemos decir, que las fotos de los móviles cuentan con una calidad muy elevada. Esto se debe a que los móviles usan programas de software con los que no importa la poca capacidad de los teléfonos. La superresolución permite, por ejemplo, tomar fotos de personas que se encuentran a una distancia lejana. Esta es la razón por la que hoy solo resisten en el mercado las cámaras cuya tecnología no puede ser replicada por los móviles.

Beneficios de las cámaras

Las cámaras tienen una lente más grande que los móviles, algo que permite imprimir las fotos en un tamaño más grande y sin perder nitidez. Con las cámaras también se puede hacer un mejor enfoque selectivo, pues el de los móviles, al hacerse mediante software, cuenta con limitaciones. El resultado de la cámara, además, es más natural.

El zoom es otro factor importante. En las cámaras es óptico, pues los objetivos son más grandes y lo permiten. En los móviles, por el contrario, se incorporan varias cámaras que cumplen esta función pero que no incorporan tanta calidad.

Si se es fotógrafo profesional, podemos encontrar amplitud de objetivos para diversas situaciones. La desventaja, eso sí, es que el equipamiento es bastante pesado. Hay que tener en cuenta el precio; las mejores cámaras de objetivo fijo pueden superar los 1.000 euros. Los objetivos aumentan el precio, pues ellos solos pueden llegar a costar incluso más que las cámaras. También existen kits más económicos que rondan entre los 400 y 500 euros, además de que siempre se puede recurrir al mercado de segunda mano.

En el caso de preferir un móvil con buena calidad fotográfica, la OCU señala el pixel 7, el iPhone 14 y el Samsung Galaxy S23 como las mejores opciones.