Entrevista a Nagore Aramburu, protagonista de ‘Querer’

Movistar Plus+ estrenó el pasado 17 de octubre el primero de los cuatro episodios que componen su nueva serie, ‘Querer’, que ahonda en la violencia de género de una forma nunca vista.

Nagore Aranburu y Pedro Casablanc logran con su interpretación en Querer (la nueva serie de Movistar Plus+) que los espectadores se den cuenta de que las apariencias no lo son todo y que, detrás de un matrimonio aparentemente perfecto, como es el de Miren e Íñigo, los protagonistas de la ficción, hay años de violencia dentro de la pareja que nadie se podía imaginar, ni sus propios hijos (a los que dan vida Miguel Bernardeau e Iván Pellicer). Ellos tendrán que decidir en qué bando están y a quién creer de sus progenitores, ya que la madre denuncia al padre por violación continuada. Aranburu nos explica cómo ha sido rodar una ficción con una trama tan complicada y dura: «Creo que la serie llega, que la gente se emociona y que, tras verla, tiene ganas de hablar sobre lo que han visto, de profundizar en el tema».

¿Cómo explicarías la trama de Querer a los espectadores? Querer es una ficción atípica al uso, es como una gran película de cuatro horas. Creo que es la primera vez en la ficción española se trata un tema tan conflictivo, tan secreto, también tan tabú y que nos va a llevar a juzgarnos a nosotros mismos, a nuestra sociedad. Es una serie que sorprenderá por su calidad, por lo bien hecha que está, que entra en la intimidad de un matrimonio de una manera que hasta ahora no se había profundizado tanto. Va a generar conversación. Que las mujeres y los hombres expliquen cómo lo han vivido al verla, que se hable de Querer.

¿Cómo definirías a Miren, tu personaje en la serie? Es una mujer de unos 50 años, casada, en familia con una buena posición de Bilbao, con dos hijos mayores y que, de cara al exterior, todo va muy bien. Pero en un momento dado de su vida decide ir a comisaría y denunciar a su marido por violencia sexual continuada.

Es una mujer que va con esta bomba a casa y hace que todo salte por los aires. Es un personaje que juega con ventaja en el inicio de la serie respecto a su familia y a su entorno porque ella sabe lo que va a hacer, estando al corriente de que por delante tiene un camino duro por recorrer para hacer encajar todas las reacciones y todas las respuestas que le vendrán de su familia y de fuera, iniciando una vía judicial. Para mí, Miren es una superviviente, una mujer valiente, pero, en ocasiones, inconsciente porque si no, seguramente no habría empezado ese camino. A mí me gusta decir que es una mujer de su tiempo, que muchas se sentirán reflejadas en ella. Es alguien cercano.

¿Y cómo se aborda el tema de la violencia en el matrimonio con una violación continuada durante años? La autora de la serie (la premiada cineasta Alauda Ruiz de Azúa) decidió que no se viera, en ningún momento, esa violencia sexual entre Íñigo y Miren, no se quería explorar el hecho en sí, sino cómo repercute en la familia, algo que no es tan fácil de detectar. No es una violencia física brutal, son otras cosas cosas. Pero se muestra cómo se descubre y cómo influye ese suceso en este matrimonio.

Entonces deja en manos del espectador qué bando elige... Según vayan viendo los capítulos, ellos decidirán si creen a la denunciante, en qué papel queda el denunciado, cómo reaccionan los hijos a un cambio tan brutal en la estructura familiar… Creo que lo aborda desde ahí, entrando en esos terrenos, más que juzgar o ver el hecho en sí, que lo explicaría todo. Lo que hace esta serie diferente es que hay que posicionarse con uno de ellos, ir viendo con quién te quedas, a ver qué te crees, qué no, ver qué justificas y qué no…

Es una serie dura, ¿cómo fue el rodaje? ¿En algún momento tuviste que parar? Nosotros, como intérpretes, nos gusta que las escenas sean duras y que podamos tener material para trabajar, y aquí había muchísimo. Nos afecta más el cansancio físico de todo un día rodando o repitiendo escenas con emociones en las que te tienes que implicar mucho como actriz, pero luego, cuando tienes algo tan emotivo, hay otros momentos que ayudan a romperlo y nosotros nos hemos reído mucho. Eligieron muy bien al reparto porque hemos coincidido en nuestra manera de trabajar.