Noelia Reverte se inició en la percusión a los siete años en la banda de su pueblo, Olula del Río. Su hermana tocaba la flauta y su padre presidía la formación, de modo que la música estaba muy presente en su casa. Podría decirse que estaba predestinada a dedicarse a ella aunque no encontraría el instrumento de su vida, la viola da gamba, hasta mucho después. El Conservatorio de Música de Olula abrió sus puertas cuando Noelia cumplió los ocho. Como no se ofertaban estudios de percusión, apostó por la guitarra. Hizo el Grado Elemental allí, el Medio en Almería y el Superior en Alicante. A los 21, con el título bajo el brazo, la joven recibió una beca de la Fundación Antonio Gala de Córdoba integrándose así en la primera promoción de esta escuela de artistas donde coincidió con otro almeriense, el escritor Juan Manuel Gil.
De Córdoba se fue a Madrid, donde empezó a trabajar en la escuela de Majadahonda y a prepararse oposiciones para el Conservatorio. Un día, Noelia miró su mesa de noche y se dio cuenta de que algo no iba bien. Una vieja obsesión había escapado de sus sueños y cobrado forma en un montón de discos de música antigua que se apilaban frente ella. “Deseaba tocar un instrumento de arco, soñaba con poder controlar el sonido y mantenerlo en el tiempo”, confiesa a LA VOZ.
De repente, un impulso la llevó a llamar al Conservatorio Arturo Soria de Madrid y preguntar la fecha de los exámenes de ingreso para estudiar viola da gamba, el instrumento que hoy sábado, a las 20 horas, tocará por primera vez en su tierra, en el Convento de Las Claras, en el marco del Ciclo de Música Sacra de la capital. La acompañará Javier Núñez. Interpretarán un programa completo de Bach, ‘Sonatas para viola da gamba y clave’. “Después de tantos años de estudio y sacrificio, es importante para mí que suene la viola da gamba, que es un instrumento poco conocido, en mi tierra. Me siento súper orgullosa de ser pionera. Estaré rodeada de profesores del Conservatorio que hace quince años que no veo, amigos y familiares”, expresa.
La voz humana
Noelia Reverte superó los exámenes de acceso del Conservatorio Arturo Soria de Madrid y, durante años, compaginó la guitarra y la viola da gamba. Pero su antiguo instrumento no tenía nada que hacer con el que, según los tratados históricos, es el que guarda mayor parecido con la voz humana. “El mío tiene siete cuerdas, pero los hay de seis, y eso implica que cuando tocas una, las otras vibran, hacen resonancia y producen un sonido súper especial. Las cuerdas son de tripa y eso, que tiene sus riesgos (sufre con los cambios de tiempo), le da una ductilidad muy profunda”, asegura.
Hace ocho años que Noelia Reverte se mudó a Italia, donde vive de la música. Está afincada a 80 kilómetros de Milán, en Cremona, “el pueblo de Stradivarius”, donde enseña viola da gamba. También trabaja en el Conservatorio de Locarno, Suiza, y actúa con su grupo Il Caleidoscopio, que sacará un disco en abril, y con otros como Il Giardino Armonico, al que admira de los tiempos en los que conservaba sus discos en la mesa de noche. Echa de menos la calidez de la gente y el cielo azul de Almería, donde espera volver algún día.
Consulte el artículo online actualizado en nuestra página web:
https://www.lavozdealmeria.com/noticia/5/vivir/102312/una-viola-da-gamba-de-olula-del-rio-para-las-claras