Un primer año perfecto para ‘Doña Pakyta’

En tan solo un año, la ‘Casa Vasca’ que doña Francisca Díaz Torres donó al Ayuntamiento de Almería a finales de la década de 1980 se ha convertido en un referente para los almerienses y los turistas; pasando a ser uno de los espacios culturales más atractivos de la ciudad.

Por este motivo, el Área de Cultura, Educación y Tradiciones del consistorio y la dirección del Museo conmemoraron ayer, sábado 7 de mayo, el primer año de vida de la pinacoteca con dos visitas guiadas especiales y con la edición de un libro de pequeño formato, editado en colaboración con la Diputación de Almería y la Fundación de Arte Ibáñez Cosentino, que compila y explica en sus páginas las mejores obras del espacio y que se entregará de forma totalmente gratuita a todos los que visiten ‘Doña Pakyta’ este fin de semana.

Una jornada, la de ayer, que comenzó con una pequeña recepción en la que la concejala responsable del Área, Ana Martínez Labella, recibió a varios sobrinos de Francisca Díaz, junto a Juan Manuel Martín Robles, director del Museo de Arte de Almería.

“En primer lugar tenemos que reiterar nuestra gratitud a la generosidad mostrada por Doña Pakyta por su donación a la ciudad. En solo un año el Museo de Arte que expone actualmente una selección de setenta y seis pinturas, esculturas y grabados realizados por artistas almerienses o estrechamente vinculados a Almería entre 1880 y 1970,  se ha convertido no solo en un centro expositivo, sino en un espacio vivo ya que en él se han celebrado conciertos, recepciones, actividades solidarias o la sección de la ‘obra invitada’”, decía Ana Martínez Labella.

Por su parte, el director del Museo quiso mostrar su “satisfacción por todo lo que se ha realizado en tan solo un año y por conseguir que la donación de Doña Pakyta haya dotado a la ciudad del museo de pintura que tanto tiempo llevaba demandando”, apuntaba Juan Manuel Martín Robles.

Un aniversario desde que este espacio emblemático abriese sus puertas como enclave cultural de la ciudad al que también quiso sumarse la familia con sus felicitaciones, por el trabajo bien hecho, “nos sentimos orgullosos de que se cumpliera el deseo de nuestra tía”, afirmaba su sobrina Nina.