Emociones que poseen ‘Alma de mármol’

La colección ‘Narradores almerienses’, que cada año desde hace doce edita LA VOZ, Arráez y Cosentino, atraviesa su ecuador. Mañana domingo, tercera entrega de la serie ‘Alma de mármol’ que puede conseguirse, como es habitual, al precio de 1,90 euros más el periódico. Un libro que estará a la venta hasta el viernes 26 de agosto.

Cuatro relatos forman el volumen, que se abre con ‘Aventuras de Dinias el Apista en su extraño viaje a la luna’, una propuesta de José González Núñez (Turre) de la que no quiere dar muchas pistas. “Creo que es mejor crear los relatos como mecanos y que, luego, cada lector, pueda reconstruirlos, volver a inventarlos como le apetezca. De esta manera, no es que el relato pueda tener distintas lecturas, sino que puede ser uno y múltiple al mismo tiempo”.

La historia se plantea como una “biografía no autorizada de un gran directivo almeriense de la industria del mármol” que nunca presume de los éxitos logrados. “Al contrario, cuando se le pregunta, siempre comenta el valor del fracaso para conseguir logros verdaderamente importantes en la vida, como, en otro orden de cosas, han subrayado personajes tan variopintos como Edison, Ramón y Cajal o Michael Jordan”.

Con una estructura circular “como la luna llena”, el relato gira en torno a tres personajes: “Marcos Franz, el supuesto empresario del mármol; Dinias, el viajero a la luna, personaje basado en la figura de un ‘vagamundo’ de La Axarquía almeriense con el que se quiere rendir homenaje a la literatura de viajes a la luna, iniciada con Antonio Diógenes y Luciano de Samosata, y Teodoro, uno de aquellos maestros rurales vocacionales de los años 50 y 60 que fueron verdaderos héroes en el impulso de la educación y en tratar de conseguir un mundo mejor para los niños de la época, a pesar de la escasez de medios de que disponían”.

Y, ante todo, el autor quiere plantear “un juego” para poder afirmar que “la verdad no es necesariamente lo contrario de la ficción”, y que un relato fantástico como éste “no tiene ningún propósito de tergiversar la verdad, sino de presentarla de otra manera”.

La autora que abrió la colección ‘Narradores almerienses’ hace más de una década, Remedios Martínez Anaya (Serón, 1949), firma el segundo cuento: ‘Mármol’. Una historia “sencilla”, fiel al estilo realista de la autora de ‘Hierba pisada’ y ‘Rosa de sangre’, que presenta a una mujer que descubre la vena artística que lleva dentro y que nadie le ha reconocido hasta ahora. “Es viuda, desvalida, con hijos pequeños en una época anterior a la actual. Un día tiene un sueño: las piedras del taller de su marido comienzan a moverse. Ella no se atreve a tocarlas porque lo considera un sacrilegio pero poco a poco se va aficionando a hacer grabados en ellas”, cuenta.

Por su parte, ‘El templo que no quiso el agua’, de Federico Moldenhauer Carrillo (Garrucha, 1955), es una narración “de corte histórico” en la que relaciona una columna de mármol “con una virgen encima” de la plaza de la iglesia de Garrucha, “extraída del mar a mediados del siglo XX”, con la conquista de Baria (hoy Villaricos) por el hermano de Escipión el Africano “y su idea de construir un templo en Garrucha con materiales de las canteras”.

Cierra el libro ‘La sirena blanca’, con el que Mar Verdejo Coto (Almería, 1971) recorre las canteras califales, el oficio de cantería y su simbología. “Golondrinas que presagian tormentas, encinas milenarias, pájaros amarillos, bosques de otros tiempos convertidos en montaña… al sur del sur. Sujeta a la tierra, con las manos y la mitad de su fantástico cuerpo enterrado, y dentro de una gigantesca escultura de mármol, hallarás a la Sirena Blanca”, señala la autora. Un texto inspirado en una escultura de Antonio López, la mitología de las sirenas y el mármol blanco de Macael.