El público acaba bailando en el escenario de Rodalquilar

Los espectáculos de la segunda noche de Costa Contemporánea llenaron ayer diferentes espacios de Rodalquilar, en los que cuatro compañías nacionales e internacionales presentaron sus piezas. Una jornada de actuaciones que fue animándose con cada interpretación hasta terminar provocando que el público se lanzara a bailar con los artistas.

La noche se inició en la Plaza de la Iglesia con la actuación gratuita de la compañía andorrana MoMo que interpretó Traços, una sensible pieza que llegó al público como un juego de niños.

Desde allí, los asistentes fueron subiendo la cuesta camino del Anfiteatro donde el que quiso pudo hacerse con una cerveza y una tapa para continuar la noche. Anna Borrás fue la encargada de seguir con las actuaciones con el preestreno de su pieza Aryo, un trabajo en proceso de creación que destacó por una danza certera y un estilo muy personal de la intérprete. Borrás fue la ganadora del primer premio del Certamen Mujer Contemporánea de 2015 y como parte del mismo se pudo disfrutar de esta actuación y está recibiendo la beca de formación que le da acceso a todos los talleres de esta edición del festival.

De este modo, la noche se fue animando un poco más con una breve pieza de diez minutos, “Wimbledon o la gran desilusión”, de la compañía Montón de Trigo & Paja que arrancó las sonrisas y el interés del público con una pequeña pero intensa historia.

Finalmente, la emoción se desbordó con el coreógrafo argentino Lucio Baglivo y su pieza “Solo juntos”, una lucha a tres de acrobacias y choques de cuerpos con música de cumbia que invitó al público a lanzarse al escenario al final de la pieza y como cierre de noche.

Por su parte, los alumnos y profesores siguen imbuidos en sus intensivos talleres. Esta mañana iniciaron sus clases los profesores Roberto Oliván, Lali Ayguadé y Julian Sicard, que ocuparán también las mañanas del viernes y el sábado.