El Parador arropa a la Virgen de la Amargura en su salida extraordinaria

La Hermandad y Cofradía del Santísimo Cristo de la Buena Muerte y María Santísima de la Amargura, de El Parador ha cumplido XXV años de su fundación. 

Para conmemorar tan importante efeméride la Hermandad ha realizado una salida extraordinaria con el paso de palio de la Santísima Virgen de la Amargura, recorriendo sus engalanadas calles y arropada por numerosos cofrades llegados de distintos puntos de la geografía provincial, además de los roqueteros que no quisieron perderse la ocasión de disfrutar con la presencia de la Reina de El Parador a la luz del día, en lugar de la noche, como tradicionalmente procesiona cada Jueves Santo.  

La medalla
Previo a la salida procesional y en el interior de la capilla, ubicada en la Fabriquilla, la diputada nacional y teniente de alcalde de Roquetas de Mar, Eloisa Cabrera, hizo entrega al hermano mayor de la Cofradía, Antonio Rabaneda Machado, de su medalla de la Corporación Municipal. Acto que contó con la presencia del alcalde-presidente de Roquetas, Gabriel Amat.     

Recordar que Eloisa Cabrera fue fundadora de la Hermandad, siendo la primera secretaria que tuvo la cofradía de El Parador. “Quería que la medalla de la Corporación Municipal del Ayuntamiento de Roquetas de Mar, que he portado durante estos diecisiete años que llevo como representante institucional, lo lleve a partir de ahora mi Virgen de la Amargura”, señaló emocionada Eloisa Cabrera.   

La salida
A las cinco de la tarde, con la presencia de los ciriales y el pertiguero, que se estrenó para la procesión extraordinaria, anunciaban la presencia en las calles de El Parador de la Santísima Virgen de la Amargura, en su paso de palio, adornado primorosamente con nardos y rosas de color champan. Con motivo del XXV aniversario, María Santísima de la Amargura estrenó también un bellísimo manto brocado y faldones del paso, ambos confeccionados por María Eugenia Manzano; así como el palio, que ha sido realizado en Málaga y todo en color rojo vino, en lugar del habitual azul. 

Los costaleros, dirigidos por sus capataces, Juan Carlos Rodríguez y Juan José Martínez, portaron magistralmente a la Virgen, estando acompañados por la Banda de Música Santa Ana, de Dos Hermanas, Sevilla.