‘La madriguera’ se descubre por fin ante los suyos

El actor Francisco Conde siempre había defendido un sueño por el que algunos le tacharon de iluso. En Almería, su tierra, donde tantas veces había trabajado en cortometrajes, era posible hacer películas que se exportaran a cualquier rincón del mundo. Porque además de las condiciones de la provincia como plató natural, con sus seis décadas de historia recibiendo producciones españolas e internacionales, había nacido ya un grupo de jóvenes, formados en el audiovisual, capaces de trabajar con solvencia en distintos departamentos técnicos. Y de aquel sueño ha nacido la realidad que hoy es ‘La madriguera’, un largometraje dirigido por el valenciano Kurro González (es su primera película como director tras una sólida carrera como montador) con el que Conde firma además el guion.

El filme, que llegará a las salas comerciales españolas el próximo viernes 2 de diciembre tras pasar por los festivales de Austin y Molins de Rei, se pudo ver anoche como cierre de la gala inaugural en el Auditorio Maestro Padilla, frente a gran parte del equipo técnico que trabajó en el rodaje durante el pasado año.

“Es un sueño por llevar la marca Almería a todo el mundo de la mano del cine”, manifestó Conde, que adelantó que el largometraje también participará próximamente en dos festivales en la India.

Sobre este thriller que “huye de hacer juicios morales”, Kurro González subrayó además la labor del equipo técnico -la vivienda donde transcurre la mayor parte de la historia se levantó en el Palacio de Exposiciones y Congresos de Campohermoso- la “disponibilidad de la gente de Almería para contar historias de aquí”.

 También agradeció el trabajo de los actores, un reparto donde además de Francisco Conde y Adriana Torrebejano, que participan en un intenso duelo interpreativo, figuran Carlos Santos, Cristina Castaño y Javier Mora. “Todos ellos nos han permitido ver vivos los personajes que hemos construido durante meses”.

Para Torrebejano, que afronta su primer papel protagonista en cine tras una trayectoria fulgurante en televisión gracias a series como ‘Tierra de lobos’ y ‘El secreto de Puente Viejo’, ha sido todo un “regalo” rodar en Almería e interpretar a Caterina, la joven que intenta ayudar a Carlos (Conde), un escritor de éxito encerrado en su casa tras una traumática experiencia. 

“La historia aborda un secuestro muy atípico. Carlos realiza acciones que ni él mismo comprende ni comparte. Cuanto más tiempo pasa Caterina en la ‘madriguera tabién crece como persona y escritora”, reveló.

Para Conde, uno de los aciertos del filme es mostrar a un personaje complejo, lleno de aristas. Para construirlo contó incluso con el asesoramiento de psiquiatras. “Vemos su fragilidad, se desnuda y se muestra con unos claroscuros que son lo más interesante para conseguir la empatía con el espectador”.