Y es una alegría que la temática de las tres películas con más candidaturas, tengan un protagonismo determinante sobre cómo ven el mundo las mujeres y su manera de intervenir en él. Si el arte va dos pasos por delante de la Revolución, esta suena en clave de ‘fe’. Paseemos por dos de estas películas.
La chica pájaro
¿Te llamas Lady Bird? Sí, es un nombre dado por mí para mí. La chica que vivía en el lado equivocado de las vías, la que le pone nombres a las estrellas con su primer novio que no le metía mano muy a su pesar; la que liga con el anarquista rebelde del instituto y que resulta ser un asocial; la que sabe valorar la amistad por encima de citas imposibles en el baile de fin de curso, y pasa una noche inolvidable bailando con su mejor amiga. La que creía odiar a su madre… Todo ese cóctel y mucho más es esta película hecha por mujeres y hombres, pero desde la perspectiva de su directora, la también actriz, guionista y dramaturga Greta Gerwig. Este filme está protagonizado por Saoirse Ronan en el papel de Lady Bird, cuya interpretación es fantástica.
Soy yo
Esta es la historia de cualquiera de nosotras. Durante la película me sorprendía recordando mis bailes de adolescente, donde mis amigas y yo no necesitábamos a nadie más para no parar de reír. De sentirme decepcionada ante las primeras expectativas sexuales, pensando que había sido culpa mía; de agobiarme porque en casa no hubiese dinero y pecadora por querer estudiar en otra ciudad… Y pese a todo, estando educada en el amor, saber a la postre mofarnos de la trascendencia que le ponemos a la vida en cada momento y que puede hacernos caer en la pomposidad de creernos el centro del Universo. La película, ambienta en 2002, hace especial hincapié en la liberación que suponía una sociedad todavía no dominada por la esclavitud del teléfono móvil, nuestro localizador para el resto de la Humanidad. Y la gran moraleja: No hay nada como alejarse de tu ciudad, de tu familia, de tu colegio católico para echar de menos a todo el paquete completo… a ratos, especialmente cuando las cosas no van bien en esa época del primer año de universidad. Es el paso de la infancia a la juventud de cualquiera de nosotras mediante esta pequeña-gran historia contada desde los ojos de las mujeres. Me ha gustado reencontrarme con aquella insegura Quijota. El guión está muy bien argumentado y junto con las interpretaciones hacen el todo muy creíble. Laurie Metcalf, en el papel de la madre de Lady Bird, me parece que está soberbia. Ya la admiraba por ser la madre de otros de mis héroes, Sheldon Cooper, de la serie: The Big Bang Theory. Estoy segura de que la Chica Pájaro se llevará más de uno de los Óscar de las cinco nominaciones a las que aspira (dirección, guión, mejor película y actrices, madre e hija). Me gustaría el de directora al menos, por lo que implica para la historia del Cine.
‘La forma del agua’
Coescrita por Guillermo del Toro y Vanessa Taylor, dirigida por del Toro y protagonizada por dos grandes actrices a las que adoro, como son: Sally Howkins y Octavia Spencer, amén de todo el magnífico reparto. De esta película tengo que decir que el resultado es impecable, me ha fascinado desde el primer segundo, por ser una mezcla bien ponderada. El guión, la escenografía, la fotografía, la música, la crítica social a la época, (EE.UU., 1963), las frases sentenciosas, su parte fantástica, el hombre-anfibio que come huevos duros y brilla de amor… No en vano está nominada para trece Óscar, que son casi todos los posibles a los que puede optar.
De esta película me quedo con la nostalgia de escuchar música en un tocadiscos, de los anuncios pintados con carteles como única opción artística. Abjuro de los verdaderos monstruos que aparecen claramente marcados en el argumento: todas las fobias a lo que no sea el varón blanco triunfador con un coche nuevo color verde agua. O sea: las mujeres, los homosexuales, los negros, la guerra, la fría o la de los egos que sufrimos en cualquier época. Me parece que Guillermo y Vanessa lo primero que hacen es un guión fantástico, cargado de guiños a la visión femenina del mundo, esa en la que hemos sido educadas: la compasión, la cooperación, el amor por encima de todo, como la salvación del modelo de sociedad que seguimos alimentando, y que queda muy bien retratada en esta época: la competitividad feroz, la que solo trae guerras y sufrimiento. La elección de los temas musicales y la fotografía, resultan el envoltorio de este gran regalo que es ‘La forma del agua’.
Frases para enmarcar
Si no ayudamos al monstruo dejaremos de ser humanos/Dignidad es lo que tiene que tener un hombre para resolver una cagada. La otra, la que vendemos a los ciudadanos, está hueca, no nos sirve para nada, por eso la vendemos/La vida es lo que queda del naufragio de nuestros sueños.
Espero de todo corazón que esta edición 2018 de la fiesta de los Óscar sea la de compartir arte, y donde la igualdad de oportunidades se pueda por fin tocar. Ya no hay nada que esperar, porque es obvio que en un mundo más justo ganamos todos.
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