Mike Gibbs estrena hoy con la ClasiJazz Big Band su versión de la Suite Iberia

Puede que, a estas alturas, a nadie le sorprenda que la primera big band profesional de España haya nacido en ClasiJazz. Aún así, la  ClasiJazz Big Band ha levantado el vuelo por encima, incluso, del reconocido espacio por el que ya venía transitando años atrás. Ahora, se dispone a pasearse por el cielo big band de la mano de Mike Gibbs. 

Hoy es una de las primeras grandes citas de este emocionante y ambicioso proyecto, a partir de las siete en el Auditorio Maestro Padilla, con el estreno absoluto de Iberiana, una adaptación a gran orquesta de jazz de una de las obras cumbres de la música clásica española para piano, como es la Suite Iberia de Isaac Albéniz.  La dirección correrá a cargo del autor Lluis Vidal. 

El incombustible Mike Gibbs ha contado con un elenco de lujo para dar forma a esta  ClasiJazz Big Band, que le pondrá alma y sonido a esta recreación de la obra de Albéniz, con un arreglo sobre esta composición que incluye entre sus escenas musicales una de las composiciones más bellas,  que lleva como título ‘Almería’.   Por razones obvias, este pasaje, que forma parte del segundo movimiento de la Suite Iberia, incluye un tratamiento especial con una sugerente sorpresa,  en la voz flamenca de Irene Molina, además de bailarines profesionales como Sara Jiménez y Borja Cortés.

La edad de oro de la música clásica española coincidió parcialmente en el tiempo con el apogeo del fenómeno big band, pero no existe precedente de una convergencia como la que va a poder disfrutar hoy el público almeriense. Pero no es un experimento. Es otro reto más en la trayectoria de Mike Gibbs, esta vez en estrecha relación con uno de los mejores pianistas de este país, con larga y fructífera experiencia jazzística.   

Concierto

Después de varias décadas de prestigio y éxitos, el  nombre de Mike Gibbs es  una entrada imprescindible de la imaginaria enciclopedia del Jazz. Ahora,  está aquí, en Almería. En ClasiJazz, cuya sala de conciertos se quedó pequeña el pasado jueves para disfrutar de un concierto estelar en el que confluyeron  épocas, estilos y sensibilidades, desde los grandes maestros norteamericanoa hasta autores europeos actuales. 

Bajo la batuta de Gibbs, maestros internacionales y músicos almerienses de nación o adopción  firmaron una de las veladas más importantes de la historia del Clasi. La singladura de este ambicioso proyecto, que es posible gracias a la formación que han recibido unos 6.000 niños ha puesto rumbo a las estrellas y ahora solo queda acomodarse en la butaca y esperar a que todo fluya.