Juan Gabriel García
01:00 • 09 sept. 2011
Carlos Aguilar es uno de los principales culpables de que en los últimos años el western europeo se haya ganado un lugar respetado en la historia del cine. Sus ensayos sobre Sergio Leone, el autor más importante de los que trataron el western en Europa, y otros trabajos sobre Clint Eastwood, Giuliano Gemma, Joaquín Romero Marchent, Eugenio Martín, entre otros, han servido para valorar, desde una visión analítica, rigurosa y reflexiva, el western europeo. Participa en el Almería Western Film Festival que se inauguró anoche.
¿Qué supone este festival dedicado al western que se celebra en Tabernas?
Para mí es muy importante porque es algo enteramente nuevo.
Vamos, que hacía falta.
Sí, creo que hace falta un festival de películas del Oeste.
¿Por qué?
Porque da a conocer las nuevas y recupera las antiguas.
Un festival del que no existen precedentes en Europa.
No, no existe ninguno. Éste es el primero que se va a celebrar y tiene lugar en un marco idóneo, Almería.
El western volvió a nacer aquí.
En la provincia de Almería se produjo la reconfiguración del género de los años 60.
O sea, que la idea le gusta.
Me parece que es muy buena y el lugar el indicado.
Los españoles que participaron en los westerns dotaron de credibilidad a las historias.
Eran actores con un físico particular que no hubiera encajado igual de bien en otros géneros.
¿Qué tenían de especial?
Que en cuanto aparecían ya te definían el personaje.
Algunos han vuelto a Tabernas.
Es el caso de Frank Braña, Dan Van Husen, Antonio Pica o Saturno Cerra que son aquellos quienes el festival ha tenido la gran idea de recuperar.
¿Qué le parece el calificativo de spaghetti?
La denominación spaghetti western es particularmente estúpida.
¿Tanto?
Sí, porque surge del desprecio por algo tan bello como el mestizaje cultural.
Sí, pero, ¿no lleva aparejado hoy un sentimiento algo nostálgico y romántico?
Sí. A fuerza de repetir esta estupidez del spaghetti western ya nos hace gracia y es entrañable y apetece recuperarla pero yo siempre la odié profundamente. Me parecía un desprecio injustificado.
¿Cuál es la esencia del cine de Leone?
Unió un género tradicionalmente norteamericano con un sentido del ritmo del cine japonés y con una serie de rasgos latinos. Esto fue algo genial, de una creatividad increíble.
¿Cómo influyó el paisaje almeriense en el western?
En la historia del western europeo desempeñó un papel fundamental porque su paisaje determinó la estética del género.
La aridez y el dramatismo de las localizaciones almerienses imprimen carácter a las películas.
La fuerza del paisaje de Almería te impone y determina un cierto estilo visual.
¿Hasta qué punto influyó en Leone?
Tanto que su cine, su gran cine, no se concibe sin los escenarios de Almería.
¿Qué supone este festival dedicado al western que se celebra en Tabernas?
Para mí es muy importante porque es algo enteramente nuevo.
Vamos, que hacía falta.
Sí, creo que hace falta un festival de películas del Oeste.
¿Por qué?
Porque da a conocer las nuevas y recupera las antiguas.
Un festival del que no existen precedentes en Europa.
No, no existe ninguno. Éste es el primero que se va a celebrar y tiene lugar en un marco idóneo, Almería.
El western volvió a nacer aquí.
En la provincia de Almería se produjo la reconfiguración del género de los años 60.
O sea, que la idea le gusta.
Me parece que es muy buena y el lugar el indicado.
Los españoles que participaron en los westerns dotaron de credibilidad a las historias.
Eran actores con un físico particular que no hubiera encajado igual de bien en otros géneros.
¿Qué tenían de especial?
Que en cuanto aparecían ya te definían el personaje.
Algunos han vuelto a Tabernas.
Es el caso de Frank Braña, Dan Van Husen, Antonio Pica o Saturno Cerra que son aquellos quienes el festival ha tenido la gran idea de recuperar.
¿Qué le parece el calificativo de spaghetti?
La denominación spaghetti western es particularmente estúpida.
¿Tanto?
Sí, porque surge del desprecio por algo tan bello como el mestizaje cultural.
Sí, pero, ¿no lleva aparejado hoy un sentimiento algo nostálgico y romántico?
Sí. A fuerza de repetir esta estupidez del spaghetti western ya nos hace gracia y es entrañable y apetece recuperarla pero yo siempre la odié profundamente. Me parecía un desprecio injustificado.
¿Cuál es la esencia del cine de Leone?
Unió un género tradicionalmente norteamericano con un sentido del ritmo del cine japonés y con una serie de rasgos latinos. Esto fue algo genial, de una creatividad increíble.
¿Cómo influyó el paisaje almeriense en el western?
En la historia del western europeo desempeñó un papel fundamental porque su paisaje determinó la estética del género.
La aridez y el dramatismo de las localizaciones almerienses imprimen carácter a las películas.
La fuerza del paisaje de Almería te impone y determina un cierto estilo visual.
¿Hasta qué punto influyó en Leone?
Tanto que su cine, su gran cine, no se concibe sin los escenarios de Almería.
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