Carteles con polémica: cofrades, contra las bases de un concurso “nefasto”

La presentación del cartel oficial de la Semana Santa de 2019 ha prendido la mecha de una polémica cofrade: el debate sobre si las bases del concurso de pintura organizado por la Agrupación de Hermandades y Cofradías son las más adecuadas para anunciar una Semana Santa de Interés Turístico Nacional está servido.

“Estas bases son como el sistema operativo de un ordenador: se han quedado obsoletas y hay que actualizarlas”, plantea Francisco Gómez Santiago, autor del cartel que anunció la Semana Santa almeriense de 2018.

Según el pintor sevillano, estas normas por las que se rige la elección del cartel deberían “liberar más al artista”, ya que él mismo afirma haberse visto “muy atado de pies y manos”.

De hecho, tal y como explica el ganador del concurso del año pasado, “siempre es un retrato de una imagen muy rotundo acompañado de una vista de un monumento, generalmente la Catedral o la Alcazaba”.

Y la composición que acompaña a esta noticia es buena muestra de ello: desde que en 2014 se recuperara la pintura como técnica para el cartel anunciador, el esquema ha venido repitiéndose. De esas 5 obras pictóricas (en 2017 quedó desierto y el cartel fue fotográfico), en 3 aparece la Catedral y en 2 la Alcazaba. “Al final, te vas repitiendo año tras año”, confirma Gómez Santiago.

Letra
“El concurso y todo lo que hay dentro de las bases me parece nefasto”, resume rotundo Víctor González. Él también es uno de los autores de los últimos carteles anunciadores de la Semana Santa de la capital. En concreto, González Felices fue el fotógrafo de los carteles de 2011 y 2012, cuando aún no se había retomado la pintura.

“No es un concurso para un cartel: es un concurso de pintura”, recuerda el propio González Felices. Además, una de las cuestiones más debatidas en los últimos días viene de la mano de la tipografía utilizada en los carteles. No en vano, no se permite incluir letra alguna. “Se las añade una imprenta sin tenerte en cuenta”, denuncia Gómez Santiago, mientras que González Felices plantea que, “si estás diseñando un cartel, la tipografía es el 50 %”.

Incluso el ganador de este año, el ubetense Pedro Líndez muestra su desacuerdo con algunos aspectos de las bases del concurso. “Yo metería a algún especialista en publicidad en el jurado para distinguir qué es un cuadro y qué es un cartel”, afirma.

Concurso
González Felices va más allá y reclama que no se haga concurso para elegir el cartel, sino que la Agrupación designe a un artista de renombre como cartelista. “Es de los poquísimos carteles de Andalucía que son pagados. Por ese dinero que estás invirtiendo, encárgale un cartel a los mejores”, pide.

Por su parte, la presidenta de la Agrupación, Encarni Molina, asegura estar “muy contenta con unas bases que han ido evolucionando y que han cubierto la necesidad de crear patrimonio para la Agrupación”.