Decir Adrián Zapata es hablar de cultura, de fabricante de sueños, de domador de criaturas, a través de la Literatura, la docencia, el teatro y la performance. Es uno de los profesores más populares de nuestra ciudad. Sus años de trabajo en radio, televisión y prensa, configuran parte del puzle de este profesor de Lengua y Literatura cuyo estandarte es la creación sin fronteras. Vistió a Alfredo Casas, compañero de radio y otras creaciones, de Azúcar Moreno, de Sonia y Selena, de Freddie Mercuri y Montserrat Caballé. Llevó el glamour a la cárcel organizando ‘La Gala del Acebuche’. Estrenó Oxígeno 18 el pasado año, una obra performativa musical y conceptual que trataba el drama de la violencia de género, con un éxito extraordinario: se vendieron todas las entradas de las cinco representaciones, y la recaudación se donó a la asociación APRAMP.
Vuelve a los escenarios dirigiendo ‘Muchismo’, una performance formada por cuarenta personas, basada en la obra de la fotógrafa alicantina Cristina de Middle. La música, como siempre, será el pegamento entre las diferentes realidades y ficciones que plantea la performance. Si hay algo certero, es que el público no permanecerá impávido.
¿Qué soñabas con 18 años?
Con ser libre y volar.
¿Qué queda de esos sueños?
Todo. Me mantengo férreo a ellos.
¿Cuál es tu comida favorita?
Muero por los calamares.
¿Qué música te transporta a tu infancia?
Los temas del programa de televisión: La bola de cristal.
¿Y la música de tu adolescencia?
Pop ochentero: Objetivo Birmania me parecía absolutamente divertido.
¿El primer disco que compraste fue?
El single ‘Oxígeno’ de Jean Michael Jarre. Entonces solo tendría nueve o diez años.
Y el último que has comprado:
‘Extrapolaciones y dos preguntas’ (Fangoria).
Tres discos de cabecera...
‘Descanso dominical’ (Mecano); ‘Ray of light’ (Madonna) y ‘A star is born’ (Lady Gaga).
Si tuvieras que definirte con un estilo musical, ¿con cuál sería?
Sin duda, con la música dance/electrónica.
¿Qué sonidos amansan la fiera que llevas dentro?
Los ritmos envolventes y etéreos.
¿Qué canciones hacen que se te dispare la imaginación?
Muchismas (risas). Las divas me ponen bastante: Lana del Rey, Taylor Swift, Katy Perry...
Cuando estás melancólico, ¿qué escuchas?
Melodías para llorar (Conchita); lo místico (Amancio Prada cantando a San Juan de la Cruz, por ejemplo).Cuando tengo que explicar a mi alumnado los poetas místicos, o la literatura en general, uso mucho la música. La Generación del 27 está muy bien recogida musicalmente por Ana Belén, Rosa León o Miguel Poveda. Para explicar a Federico García Lorca también les pongo también a Miguel Poveda y ‘Ombra’, de la Fura dels Faus. ‘Ombra’ es un espectáculo fabuloso. Describen la personalidad de Federico García Lorca en clave de música dance y electrónica. La música y la literatura hacen un maridaje perfecto.
¿Cómo te informas de la actualidad musical?
Hoy por hoy las redes sociales lo son todo. Instagram es una fábrica de noticias. Youtube, también.
¿Qué música te gusta en los momentos íntimos?
La música relajante con base electrónica, chill out.
Para conseguir un subidón de energía te pones a bailar
Female vocal trance, por ejemplo Emma Hewitt. En otros momentos, el petardeo no viene nada mal, por ejemplo Baccara, Rafaela Carrá, Abba…
¿Cuál y dónde ha sido el concierto más impactante que has visto?
Han sido varios: U2 en el estadio Olímpico de Berlín; Björk en Ola festival (Guardias Viejas); Madonna (Palau Sant Jordi)...
Para relajarte, ¿qué música te pones?
Baladones con potentes letras, del tipo: Never Enough (The Greatest Showman).
¿Con qué música te gusta conducir?
Soy muy ecléctico musicalmente. Me encanta conducir escuchando música; me inspira muchísimo. Mi mente es como una base de datos donde hay cantidad de espectáculos, montajes de artes escénicas para darles forma. Conducir con música es la mejor manera para mí de crear. Ver acabado y estrenado un proyecto es orgásmico.
Vinilo, cd, mp3… ¿qué formato prefieres para escuchar música?
Vinilo durante mi infancia y adolescencia; hoy por hoy Cd y mp4.
Si tu vida se llevara al cine, ¿cuál sería la BSO que la ilustraría?
Me gustaría algo hipnótico, moderno y electrónico, con voz femenina muy aguda. No es algo que ya esté hecho. Sería una música muy de futuro. No hay que mirar al pasado. Hay que mirar hacia adelante, hacia el futuro.
Si tuvieras que definir musicalmente lo que está pasando en el mundo, ¿con qué canción o tendencia musical sería?
Una gran ópera clásica y dramática.
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