Ocho jardines, patios y claustros de Almería para descubrir

Hay una Almería por descubrir. Una ciudad que guarda anécdotas relacionadas con el cine y con la historia que han dejado su rastro en sus jardines, sus patios y sus claustros. Espacios al aire libre tan desconocidos como el Convento de Las Puras, tan coquetos como el Patio del Mandarino y tan majestuosos como la Catedral que podemos y debemos admirar y curiosear. Porque están a la vuelta de la esquina y porque forman parte de nuestro patrimonio. He aquí una selección de ocho para disfrutar sin prisas:

Jardines de la Casa del Cine

En el barrio de Villablanca, los jardines de la Casa del Cine constituyen un escenario idílico por el que pasear entre buganvillas y árboles de muy diversa procedencia. Se trata de un espacio idóneo para celebrar cualquier propuesta, sobre todo si se tiene en cuenta su conexión con la época dorada del cine de Almería cuando el entonces llamado Cortijo Romero dio cobijo a personalidades ilustres como el ‘beatle’ John Lennon, quien compuso allí ‘Strawberry Fields Forever’.

Pueden visitarse de martes a domingo de 10.30 a 13.30 horas y viernes y sábados de 18 a 21 horas. La entrada cuesta tres euros.

Jardines del Museo de Arte Doña Pakyta

En la Plaza Emilio Pérez, la casa más bonita de Almería -chalé de estética norteña conocido como la Casona Vasca- está rodeada por unos jardines que todos hemos mirado embelesados alguna vez. Flores de colores y palmeras alegran este espacio gestionado por el Ayuntamiento que acoge actividades culturales como el Festival de Jazz. En el interior, la Fundación de Arte Ibáñez Cosentino ofrece una amplia panorámica del arte almeriense.

Están abiertos al público de forma gratuita de martes a jueves de 10.30 a 13.30 horas, viernes y sábados de 10.30 a 13.30 y de 18 a 21 y domingos de 10.30 a 13.30 horas.

Patio de los Naranjos del Cuartel de la Misericordia

Bajo la atenta mirada de la Alcazaba, se alza el maravilloso Patio de los Naranjos del Cuartel de la Misericordia (calle General Luque). Un hermoso lugar para ver el atardecer de Almería junto a una de sus columnas toscanas con arcos de medio punto. En la actualidad, este edificio de finales del XVIII es sede de la Subdelegación de Defensa.

En el pasado, el patio fue el escenario principal del Festival de Músicas del Mundo Alamar aunque hoy acoge, sobre todo, eventos privados.

Patio del Mandarino

En la plaza Bendicho se oculta el coqueto Patio del Mandarino, sede del área de Cultura de Diputación. El árbol que le da nombre ocupa un lugar destacado y brinda una gran sombra al que visita este espacio de suelo empedrado situado a espaldas de la Catedral.

En los últimos tiempos, se ha convertido en epicentro de citas singulares como el programa ‘Almería Experiencias, Alex’. Un proyecto que da cabida a eventos artísticos experimentales de pequeño formato como música en directo y lecturas poé­ticas.

Patio del Museo de Almería

Uno de los centros culturales de la vida social de la ciudad aún tiene espacios por descubrir. Se trata del patio del Museo Arqueológico (Carretera de Ronda), un lugar que apenas ha sido objeto de su intensa programación de actividades y que bien merece una visita o un evento al aire libre que alimente la versatilidad de un espacio a caballo entre la Nube de Siret, su original columna estratigráfica y las colecciones dedicadas a Los Millares, El Argar, Roma y la Almería islámica.

El horario de apertura del centro es de martes a sábado de 9 a 21 horas y domingos y festivos de 9 a 15 horas. Cierra los lunes.

Claustro de la Escuela de Arte

Imposible referirse al claustro de la Escuela de Arte sin aludir al rodaje de la escena de ‘Indiana Jones y la última cruzada’ en la que su director, Steven Spielberg, logró meter un Rolls Royce, dicen que porque en la Alhambra no se lo habían permitido. Corría 1989. El patio interior de este antiguo convento en la Plaza Pablo Cazard contagia al visitante entre detalles góticos y blasones reales.

Hoy es un centro educativo por el que pasan a diario alumnos y profesores que exponen y realizan acciones artísticas al abrigo de sus galerías.

Claustro de la Catedral

Si el interior de la Catedral de Almería es un misterio para parte de la ciudadanía, su bello claustro neo­clásico -joya de la corona del conjunto- no lo es menos. La escasa vegetación no está reñida con la solemnidad de sus arcos y sus bóvedas. Se accede a él a través de una vistosa portada gótica y conecta con la sala capitular, donde se dirimen cuestiones clave.

La visitas culturales a la Catedral vienen a desembocar en el claustro. El precio de la entrada es de cinco euros -excepto para menores de 12 años, personas con discapacidad, niños de familias numerosas y residentes en la ciudad de Almería- e incluye audioguía.

Claustro del Convento de Las Puras

Desconocido por motivos tan evidentes como que se trata de un convento de clausura -el de la Purísima Concepción-, el interior del conjunto (calle José Ángel Valente) custodia un precioso claustro porticado con zona ajardinada y rodeado por arcos construidos en ladrillo y sostenidos sobre columnas toscanas.

Tanto el convento como la iglesia datan del siglo XVI. En muy raras ocasiones permiten el acceso a la gente.