Son cosas que pasan. Un pequeño incidente que en un tiempo quedará en simple anécdota y que, seguramente, esté de sobra reparado antes del próximo Martes Santo, pero lo cierto es que en la procesión extraordinaria el Cristo del Amor, obra de Jesús de Perceval, ha sufrido un percance.
Fue al poco de salir de la iglesia de San Sebastián, en la calle Murcia, cuando un golpe fortuito ha dañado la imagen que el almeriense tallara en el año 1946.
El daño fue apreciado por algunos de los almerienses que disfrutaban de la procesión extraordinaria con la que la corporación del Martes Santo celebraba el fin de fiesta de su LXXV aniversario: el Cristo del Amor ha procesionado durante buena parte del escueto recorrido con dos dedos menos, tal y como se puede apreciar en la siguiente imagen:
En concreto, la talla de Perceval ha perdido debido al golpe las falanges de los dedos corazón y anular de su mano izquierda, la del lado opuesto al lugar en el que, en la salida y forma extraordinaria, se encontraba Nuestra Señora del Primer Dolor, obra de José María Hervás Benet.
El incidente se produjo en el inicio del itinerario. A la Hermandad del Amor aún le quedaba bajar por la calle Granada, llegar a la Puerta de Purchena para ir en busca de la calle Juan Lirola a través de la Rambla Obispo Orberá y llegar, finalmente, al templo desde el que sale cada Martes Santo.
Una anécdota que quedará para la historia cofrade almeriense, esa que se recogerá en anales como los que prepara ya el investigador Fernando Salas Pineda: cuando el Amor perdió dos dedos.
Consulte el artículo online actualizado en nuestra página web:
https://www.lavozdealmeria.com/noticia/5/vivir/179175/el-cristo-del-amor-pierde-dos-dedos-tras-un-golpe-en-su-procesion-extraordinaria