Sin vía crucis en la Catedral: el obispo “no lo considera oportuno”

Donde dije digo, digo Diego. O, mejor dicho, donde manda patrón, no manda marinero. En cualquier caso, el rico refranero del castellano parece más que válido para resumir el cambio de rumbo eclesiástico vivido en las últimas horas en torno a la que había sido, hace unas semanas, una buena noticia cofrade.

Era una vieja reivindicación cofrade: que el via crucis general organizado por la Agrupación de Hermandades y Cofradías tuviera como escenario la Catedral, el primer templo de la Diócesis de Almería. 

La renovada junta de la Agrupación, liderada por Isaac Vilches, quería intentarlo y así lo solicitó al Cabildo catedralicio a finales del mes de octubre. 

El día 28 de noviembre, el Cabildo de la Catedral de la Encarnación enviaba al ente con sede en la calle Ciprés la buena nueva: el Cabildo “acoge con agrado la petición, prefiriendo el claustro como espacio propio para las procesiones”.

Menos de un mes ha durado la alegría en la casa del cofrade: la Iglesia almeriense recula por orden del obispo de la Diócesis, Adolfo González Montes.

En concreto, en el día de ayer los hermanos mayores de las cofradías almerienses recibían la noticia contraria: el Cabildo catedralicio, a través de su Secretario, Francisco Escámez, comunicaba que “estos temas dependen directamente de la decisión de Su Eminencia” el señor obispo.

Así, tras el visto bueno del Cabildo catedralicio, González Montes ha resuelto que “no considera oportuno celebrar un vía crucis después de otro, sino que sería más conveniente unirse y participar en el vía crucis con la imagen del Santo Cristo de la Escucha” que se celebra tradicionalmente cada Cuaresma en el interior de la Catedral. 

El obispo, eso sí, recuerda que las hermandades “pueden seguir haciendo el que ya tenían autorizado anteriormente por el Casco Antiguo”. 

Así, el pesimismo ha empañado algo las últimas horas de los que reivindicaban que  ese acto cuaresmal de todas las hermandades debe tener como lugar predilecto el primer templo de la Diócesis. Además, ahora se teme por el devenir de otros futuros proyectos tras este cambio de opinión en el seno de la Iglesia. Pero, claro, donde manda patrón, no manda marinero.

Y así se esfumó el sueño de un via crucis general en el interior de la Catedral. Otra vez será.