El único niño de Velefique sale a dar su primer paseo

José María tiene dos años y es el único niño menor de 14 que queda en Velefique. Ayer domingo, este pueblo de 110 habitantes se convirtió en su sala de juegos cuando pudo salir a pasear en compañía de su padre.

"Él iba tan normal, lo que sí echa de menos es ir a la guardería, en Tabernas, donde hay un montón de niños", explica su padre, Jesús García, en declaraciones a LA VOZ.

El kilómetro permitido por el Gobierno para el paseo de los pequeños abarca prácticamente todo el casco urbano de este municipio de la Sierra de los Filabres, de modo que José María tiene espacio de sobra. Su salida se enmarca dentro de la primera muestra de relajación del confinamiento, decretado a mediados de marzo como consecuencia de la actual crisis sanitaria.

Los vecinos se asomaban a puertas y ventanas al paso del niño para decirle adiós y mostrar la alegría de ver cómo las calles recobran la vida. "Son todos personas mayores, jóvenes prácticamente quedamos mi mujer y yo, así que les hace mucha ilusión verlo, sobre todo a la abuela, mi madre, que vive cerquita", indica.

José María es el futuro del pueblo, el nieto de todo Velefique. "Lo malo es que luego se van a Almería a estudiar y no vuelven", lamenta el padre.

"Los fines de semana sí vienen más niños, hijos de gente que trabaja en Almería, El Ejido y Roquetas y que regresa a ver a la familia", indica el alcalde de Velefique, Rafael García.

Tras el caso de este niño se esconde el drama de la España vaciada. De hecho, su madre, Mariana Dumistrascu, hace a diario 72 kilómetros para que su hijo pueda jugar con otros pequeños en la guardería de Tabernas.

"Los padres están preocupados, porque su hijo necesita convivir con otros niños, interactuar con ellos", añade el primer edil.

El municipio de Velefique recibió a esta familia con los brazos abiertos, y está deseando que otras sigan su camino. El padre de José María emprendió gracias a una zona de corrales puesta en marcha entre el ayuntamiento y la Diputación y ahora se dedica a la ganadería. Y la madre trabaja a media jornada como limpiadora en el Consistorio.

“Hemos fijado a esta familia aquí, a ver si en un futuro conseguimos que vengan más personas, más facilidades no les podemos dar”, apunta García, que señala el cierre del colegio de Velefique hace ya muchos años como el principal motivo que echó del pueblo a otras parejas jóvenes.