La mayor colección de obras de Carmen de Burgos vuela hasta Alcalá de Henares

A Roberto Cermeño, un coleccionista de libros madrileño, le llegó hace veinte años un ejemplar de Puñal de Claveles, la recreación novelada del Crimen de Níjar, y brotó en el bibliófilo una obsesión por la autora de Rodalquilar. 

Fruto de esa pasión -casi enfermiza como toda pasión que se precie- aglutinó la mayor colección de obras de Colombine que existe en el mundo: cerca de 500 ejemplares originales en distintas ediciones de la autora de La malcasada que fue amasando con codicia de joyero judío a lo largo de dos décadas. Solo se le acercan dos colecciones más -las dos públicas- sobre Carmen de Burgos: la de la Biblioteca Nacional y la de la Diputación Provincial de Almería, aunque la suya  es la primera del podio en número de ejemplares, Pero la avidez con la que ha ido construyendo ese cañamazo de papel antiguo con casi todas las novelas y novelitas de la celebérrima autora -solo le faltan 9 de las 250 que firmó la almeriense y sabe dónde están- se ha transformado en generosidad a la hora de donarla para que todo el mundo tenga acceso a esas páginas tan historiadas y cargadas de talento literario.

Primero, poniendo Roberto a disposición de la Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes, dependiente de la Universidad de Alicante,  toda su colección digitalizada compuesta por casi 500 ejemplares que se pueden consultar a golpe de clic en cualquier parte del mundo. Pocos gestos se le pueden siquiera acercar al protagonizado por Cermeño a la hora de contribuir a universalizar la argamasa literaria creada por  la insigne almeriense.

Por si fuera poco, Cermeño, de 70 años de edad y veraneante asiduo en Almería,  ha decidido, donar también   toda su colección de libros originales en papel de Carmen de Burgos a la nueva Biblioteca Patrimonial del Instituto Cervantes que acaba de abrirse en Alcalá de Henares.

Allí, en esos estantes abigarrados en la cuna cervantina, reposarán para siempre ese medio millar de volúmenes de Colombine, todo ese talento narrativo que se pondrá próximamente a disposición de los lectores y seguidores de la escritora, no digitalizados como en la Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes, sino en el papel original y rugoso en el que fue impreso hace ya más de un siglo.

En esta donación, ya empaquetada, que ha sido valorada en más de medio millón de euros, se incluyen libros originales en varias ediciones conformando un reposorio bibliográfico de 1.500 ejemplares que serán una delicia para los holigans de la ilustre narradora almeriense. 

La Biblioteca del Instituto Cervantes en Alcalá de Henares se inauguró el pasado año con 8.000 libros de poesía donados por el poeta vasco, Jesús Munárriz.

De Perico de los palotes a Honorine

La autora almeriense que da nombre al Paseo Marítimo de la capital nació en Almería en 1867 y aunque sufrió un desgraciado matrimonio desde muy joven con el plumilla Arturo Alvarez, pudo aprender el oficio de periodista de mano de su suegro, el reputado periodista Mariano Alvarez, en la imprenta y redacción que poseía en un caserón de la calle Las Tiendas que aún se conserva. Se separó de  su marido, abandonó Almería y marchó a Madrid donde se convirtió en pionera del periodismo femenino y se consagró como escritora. Aunque el pseudónimo universal que le dio fama fue el de Colombine, también firmó trabajos en prensa y revista con el mote de Gabriel Luna, Perico el de los Palotes,  Honorine. o Marianela.