“Los Ángeles y Almería se parecen: buen clima, desierto, palmeras y mucho cine”

La niña que veía “una y otra vez” ‘Los Goonies’ en VHS, la que se aficionó al policiaco gracias a su abuelo y la que se salió de ‘El rey león’ porque su prima no paraba de llorar (“se lo recuerdo todas las navidades”, dice riendo) ahora hace cine desde Los Ángeles. Allí llegó en 2013, tras graduarse en Derecho en la Autónoma y estudiar interpretación con Cristina Rota, para trabajar como actriz, aunque se enamoró de la producción. Hoy, la almeriense Ainara Landon es cofundadora de Prickly Pears Films. La película ‘La corriente’, uno de sus últimos trabajos, se estrenó en el pasado Festival Internacional de Cine de Almería (FICAL).

¿Encontró el sueño americano?

Encontré oportunidades, la oportunidad de darme el tiempo para explorar y acabar trabajando en lo que me gusta. No sé si el sueño americano, pero por estar lejos me he juzgado menos. Una oportunidad puede llegar en cualquier momento, toda experiencia es enriquecedora. He hecho de pirata en el Paseo de la Fama de Hollywood y he servido a Leonardo DiCaprio, Jennifer Aniston y Tom Hanks en una cena privada en casa de Joel Silver. Es esa sensación de que cualquier cosa puede suceder, libertad para soñar.

¿Cuándo supo que su lugar estaba en la pantalla?

No fue necesariamente en la pantalla. De pequeña tocaba el piano, bailaba y teníamos funciones en el colegio, pero recuerdo tener muchos nervios y siempre desear, minutos antes, no tener que salir al escenario. Con el tiempo descubrí que me gustaba esa sensación, la adrenalina causada por los nervios y el momento de dejarme llevar y disfrutar una vez ahí. Siempre fui muy 'peliculera' y me encantaba escribir historias. Supongo que era cuestión de tiempo.

Terminó Derecho en la Autónoma mientras estudiaba actuación con Cristina Rota. ¿Cómo recuerda aquellos años?

Recuerdo tener la sensación de no estar haciendo ninguna de las dos cosas bien (risas). Tenía el síndrome de impostora en ambos sitios, pero a pesar de ello seguí con las dos cosas, y me gusta pensar que esos años, que fueron intensos y de esfuerzo, hoy en día me son útiles para muchas de las experiencias que tengo trabajando en producción.

Actriz y productora. ¿Qué traje es más cómodo?

Difícil, son trajes muy distintos. Ser actriz suele ser más vocacional y ser productora requiere unas virtudes muy distintas. En ambos casos hay una pasión por crear y contar historias. Como actriz quizás llego a disfrutar más, pero también me juzgo más porque el trabajo no siempre es el resultado del esfuerzo.

¿Qué tipo de cine impulsan desde su productora Prickly Pears Films?

Somos aún una productora pequeña y joven, pero hemos tenido un buen año: tres películas, un corto y un documental. Apostamos por proyectos que demuestren creatividad, visión y tenacidad, por el cine independiente de calidad, más allá de los recursos de producción. Buscamos riqueza visual e historias inspiradoras.

Para el cine ‘indie’, ¿las plataformas son un aliado o un gigante al que cuesta convencer?

Hay que verlas como un aliado. Han llegado para ser un catálogo de contenido y hacer llegar al público cine que de otra manera no sería posible, sobre todo en el caso del independiente. Ahora hay mucha más demanda y una mayor variedad de contenido que abre las puertas al cine ‘indie’. 

Estrenó en el Festival de Cine de Almería (FICAL) ‘La corriente’, una de las películas que ha producido. ¿Profeta en su tierra?

No sé si profeta, pero me sentí muy acogida en el festival, nos trataron fenomenal y estoy muy contenta de haber podido compartir en Almería uno de mis primeros proyectos como productora. Hace especial ilusión volver y sentirse tan arropada. El pase especial de 'La corriente' fue tras la gala del audiovisual almeriense, en la que se dan unas ayudas increíbles. Espero poder participar pronto.

¿Cómo se ve Almería desde la distancia?

Muy bonita. Me encanta estar viendo una película o serie, como ‘Wonder Woman 1984’, ‘White lines’ o ‘Juego de tronos’, y pensar: “¡Anda!, eso parece Almería”, y que efectivamente lo sea. A veces bromeo con que me adapté muy bien a Los Ángeles porque parece Almería y me siento como en casa. Pero lo cierto es que tienen desierto, palmeras y buen tiempo casi todo el año. Y también mucha historia del cine.

¿En qué lugar de su tierra rodaría una película?

Por paisaje, Cabo de Gata, porque es precioso. Pero hay muchos sitios bonitos y aún por descubrir en Almería para el cine. Tengo un par de ideas para futuros proyectos y rodar allí sería un regalo.

¿Y cómo se imagina esa película?

Por supuesto no descarto un wéstern, creo que sería muy divertido y cómodo para mí hacerlo en Almería. Me hizo mucha ilusión poder ir a FICAL y espero volver en un futuro con una película rodada allí.

¿Qué proyectos tiene para este año 2023?

En enero rodamos en Los Ángeles ‘Witchy Ways’, drama romántico sobre brujas; cuando leí el guion me recordó a ‘Prácticamente magia’. Tenemos un posible documental y otros proyectos aún en desarrollo y novedades y noticias relacionadas con proyectos de estos últimos años. ‘La corriente’ se estrenará internacionalmente en uno de los festivales más importantes de Estados Unidos, algo que podremos revelar a mitad de enero.

¿Qué le ha enseñado de la vida trabajar en el cine?

Tantas cosas… A trabajar en equipo: tanto como actriz, porque lo más importante es escuchar, como detrás de cámara, donde el éxito de una producción, sin duda, reside en el equipo que formas y en el respeto y admiración por el trabajo de cada uno. Te das cuenta de que el talento es importante, pero la constancia y el trabajo duro marcan toda la diferencia. Debes estar siempre activo y preparado, nunca sabes cuándo te llegará la oportunidad. Cada día es igual de importante que el siguiente, y nada está asegurado en este trabajo. Y creo que eso debería ser aplicable a todo en la vida.