El pintor del Rey vive en Roquetas de Mar

Antonio Menchón es el pintor que hizo el primer retrato oficial del rey español Felipe VI, el lienzo se expone en el museo Histórico y Militar de A Coruña. Pero la primera pintura que realizó del monarca fue como Príncipe de Asturias vestido con uniforme de campaña. Menchón se vistió con su traje de gala militar y acudió a su audiencia con el rey en el Palacio Real. Cuando terminó el encuentro fotografió a uno de los centinelas que había en el patio de armas. Después elaboró una pintura que ocupa un lugar privilegiado en su estudio como recuerdo de ese día. Desde entonces ha realizado cinto retratos más del monarca español, una serie de óleos de deportistas de élite en el momento cumbre de su carrera, incluso pintó al propietario del Almería, Turki. 

Nacido en Murcia en 1973 y de carácter autodidacta, el artista se centra en la luz, sus referentes son Velazquez, Rembrandt y Sorolla. Trabaja en gran formato y ha ideado unos raíles que se deslizan desde la primera planta del estudio hasta el subsuelo donde continúa su taller. Es como un cerebro renacentista inquieto, lleno de ideas, perfeccionista y dedicada al trabajo duro. Lejos de esperar a que las musas lleguen a buscarlo Menchón abre su estudio, situado a pie de playa, a las 07.00h de la mañana, toma un descanso para almorzar y continúa hasta las 21.00h. Una rutina ininterrumpida de lunes a sábado, solo para de pintar cuando viaja porque algunos de sus lienzos superan los dos metros ya que las reproducciones son a tamaño real. 

¿Eres autodidacta en la pintura?

Sí, de crío veía a mi padre, él pintaba acuarela, hacía pocos óleos. A los 18 años me fui a la academia militar en Burgos e hice mi primer exposición, totalmente alejado de mi círculo de conocidos. Inauguré la muestra en un sitio precios, pero solo estuvimos el alcalde y yo, no fue nadie. Si no me desmoralicé en aquel momento… 

¿Siempre has hecho retrato hiperrealista?

Sí, pero creo que no es hiperrealista como se conoce, porque si te acercas no ves cada detalle. Quiero dar a conocer el efecto hiperrealista o más si se puede, a base del color, la luz. Mucha gente me dices que es más realista que una foto. Porque tengo más herramientas que una foto: aceites, puedo dar trasparencias, tengo colores de cadmio, de cobalto…

El pintor murciano suele trabajar rodeado de arte, normalmente lleva varios cuadros a la vez porque las técnicas con las que trabaja requieren tiempo de secado. Para ilustrar sus palabras señala una de sus obras, una geisha. La novedad de esta pintura es que está realizada sobre piedra como alabanza a las canteras almerienses e innovación personal sin renunciar a la técnica. “Si aprecias la geisha hay partes desenfocadas porque quiero que te fijes en la cara. Cuando veo un cuadro hiperrealista creo que pierde fuerza porque es una sucesión de detalles perfectos”, dice Menchón.  

Este retrato de la geisha está sobre piedra

Sí, es cuarcita. Estoy preparando una nueva colección, quería que fuera clásico y sin renunciar a la técnica e inspirarlo en las canteras de Almería. No es fácil preparar la piedra para pintar en ella, lleva mucho estudio y en la forma que está hecha la pintura puede perdurar 1000 años. He empezado con geihsas, pero haré más temática. Todavía no lo he mostrado, esta será la próxima colección que viaje a México. La piedra está aligerada por atrás para que pese como un cuadro enmarcado. 

¿Dejaste la carrera militar para dedicarte a la pintura?

Ascendí a brigada, pero la vida son circunstancias y decisiones, me dediqué a la pintura. 

La pintura me ha dado la oportunidad de exponer en lugares impresionantes, como el Palacio Real, la Bolsa de Valores de México, el museo Pompidou, el Museo Picasso, la Maratón de Nueva York, el Real Casino de Murcia, que es un sitio espectacular…

Me gusta mucho conocer gente, siempre los clientes quedan de amigos y tiempo después me piden más trabajos. Por ejemplo, esta bailarina es un encargo de un coleccionista de arte que pasó por aquí, ya es un amigo, cada semana hablamos y viene al estudio una vez al año para estar aquí. Me enriquece formar parte de colecciones donde está Miró u otros grandes artistas. 

En estas alturas de la conversación Menchón se ha levantado para mostrar al detalle su obra y esboza una sonrisa de plena satisfacción cuando rememora a dónde ha llegado su trabajo. Sin embrago, no puede olvidar aquellos días en los que se enamoraba de los cuadros y le costaba venderlos, pensaba que no podría llegar a más con una obra o, no quería que vieran la evolución de su trabajo porque no estaba contento con el resultado. Hoy su estudio permanece abierto por las ventanas puede verse cómo el murciano trabaja, incluso hay quien lo visita y le dice: “a mi me gusta como está, puedes dejar el cuadro así”, comentario que abraza con cariño.