“Estamos creando público cualificado para ver y entender la danza“

Isa Guirado ha vivido todas las vidas del Conservatorio de danza desde que allá en 1980 era un piso en el edificio Concordia de la capital. Vive por y para la danza y aunque lo suyo es el flamenco, dice que es bailarina y bailaora. Su pasión por el baile es tal que no ha dejado de impartir clases a pesar de los requerimientos de su puesto. La vida y el esfuerzo han hecho que pueda ser testigo y partícipe en la realización de ese sueño que ha sido inaugurar el nuevo espacio que dignifica la danza en Almería: el Conservatorio Kina Jiménez.

Ha pasado ya el primer trimestre en el nuevo edificio, ¿cómo lo está viviendo?

Han sido tres meses muy intensos y se ha pasado muy rápido. Todavía hay mucho que colocar, cosas empaquetadas, la red wifi por ejemplo todavía no han conseguido instalarla… pero cuando entras a la clase se te olvida todo.

La ilusión suple las carencias.

Sí, es secundario todo lo demás. ¡Ahora todo está ordenado y recogido! Todo ha sido mejoría, y tenemos un espacio, incluso un teatro que nos permite por fin hacer todo como debe ser.

¿Le ha generado nuevas ilusiones estar aquí?

Sí, entran ganas de hacer muchísimas cosas. El profesorado que ha venido en la Semana de la Danza que acabamos de celebrar y que está acostumbrado a moverse por centros diferentes, o el director del Ballet Nacional de España, Rubén Olmo, dijo que es maravilloso, que puede ser uno de los mejores centros que hay en España.

Habrá supuesto cambios en todos los aspectos para el equipo educativo y alumnado.

Cuando vinimos por primera vez a traer las cosas en julio fue impresionante, nos quedamos impactados. Este edificio lo primero que te transmite además de amplitud, es luz. Tiene una energía muy positiva. Cuando vinieron los compañeros en septiembre, sentimos que podíamos estar juntos y ser un equipo, (antes estábamos divididos en unas 5 zonas diferentes) porque antes no coincidíamos.

Hablemos de danza: ¿Cuál es la cualidad más importante de un bailarín?

La pasión, la ilusión por lo que haces: eso te llevará a trabajar bien para poder conseguir los que tienes que hacer. Lo primero es el alma, son las ganas. Puedes tener aptitudes, pero si no le echas pasión, no tienes ilusión, harás una secuencia de pasos, una ejecución pero no interpretarás, no estarás bailando.

¿Se mira con la suficiente seriedad y respeto la formación en el ámbito de la danza por fin?

Todavía no. Es muy conocida la música, la danza no, hay un poquito de discriminación. Por ejemplo, un alumno que es deportista, que se le considera de élite, cuando va a la universidad tiene una reserva de plaza por ello, y ese deportista no entrena más horas que las que nuestro alumnado entrena, sin embargo no tiene reserva de plaza para la universidad. Es un lucha que hay que mantener.

Kina Jiménez fue su profesora desde muy joven, luego ella fue directora del conservatorio y ahora usted.

Sí, y mientras ella fue directora yo era secretaria del conservatorio. Ella para mí no es solo una compañera, tenemos una unión especial, sabe todo de mí, es una segunda madre o como ella dice, mi madre artística.

Comparta lo que le ilusiona en este momento.

Que el centro termine de funcionar bien y con el alumnado cojamos nuestra rutina, y crear escuela, que sea alumnado implicado, que tenga nivel y despertar en ellos la pasión y el amor por la danza.

Eso es crear afición.

Estamos creando público cualificado. Todo el alumnado no se va a dedicar a nivel profesional a ser bailarines, pero sí van a ser un público entendido, y se está formando en danza y la disciplina que da la danza es útil para toda su vida y todos los ámbitos. Serán un público con una formación y cuando vean un espectáculo van a ser unos entendidos.