“El 28F Almería dijo sí”

“El proceso autonómico andaluz es uno de los temas que más bulos ha generado en el último medio siglo” afirma Rafael M. Martos, el periodista almeriense que acaba de publicar“ Por Andalucía libre. La posverdad construida sobre el proceso autonómico andaluz”, editado por Hojas Monfíes y que ya está disponible en librerías y online.

A lo largo de 230 páginas, el libro es un 'fact check' al relato oficial generado en las últimas décadas, y comienza repasa la posición de los distintos partidos políticos de la época sobre la configuración territorial de España en general, y de Andalucía en particular, tanto antes de la muerte de Franco, como en los albores del proceso democrático y la época constituyente. Además relata las claves del 4D de 1977 y quienes fueron los auténticos protagonistas, cómo se llega a la convocatoria del 28F que precisamente se hace en Almería, cómo y por qué se produce el bloqueo autonómico, y de qué manera se salió de aquel atolladero. 

También se aborda por qué ni Ceuta ni Melilla siguieron siendo andaluzas, los pactos de Carmona y Antequera, qué decía cada cual según sus actas, apunta detalles de cómo fue recortado el Estatuto de Autonomía y quién lo provocó, así como la “infumable reforma que se hizo en 2007”.

Señala que le han movido dos razones a la hora de escribir este libro, y una de ellas es que “aunque el libro no es sobre Almería, la insistencia de algunos en asegurar que la provincia dijo no en el referéndum del 28F, cuando hubo diez veces más síes que noes, ha sido un acicate, a ver si de una vez por todas se enteran”. Aclara que “legalmente la consulta se perdió, pero de ninguna manera se puede decir que Almería votó no, porque Almería votó sí de un modo abrumador, a lo que se une que la casi totalidad de ayuntamientos y hasta la Diputación se pronunciaron a favor, así como todos los parlamentarios posteriormente”.

El periodista, que también es autor de otro libro titulado “La bandera de la infamia”, en el que aborda las falsedades sobre las que se fundamentan la enseña de la provincia de Almería y el Día del Pendón, señala que el otro motivo que le impulsó a escribir la nueva obra es que “en una sesión en el Parlamento de Andalucía, el PSOE presentó una PNL sobre el 28F y quedé impresionado por el desconocimiento de los más mínimos datos históricos que tenían todos los intervinientes, en quienes ha calado un relato alejado diametralmente de los hechos”.

Asegura que “no es cierto que el PSOE pueda atribuirse el mérito del desbloqueo autonómico” y que “tampoco es verdad que se le pueda atribuir al PP actual un posicionamiento contrario a la autonomía andaluza por el 151 de la CE, puesto que proviene de la UCD ya que Alianza Popular era extraparlamentaria a estos efectos, y este partido, en Andalucía en general y en Almería en particular, defendía lo mismo que todos”. A día de hoy, indica el autor, “el PP debería rebelarse contra ese relato y reivindicar su papel en aquellas fechas en Andalucía en general y en Almería en particular, porque solo su respaldo explica el resultado positivo”. 

En ese sentido añade que “en el libro comento el papel de determinados personajes como los socialistas Rafael Escuredo, Felipe González o Alfonso Guerra, y también la providencialidad de Manuel Clavero Arévalo. quien sacrificó su carrera política en el Gobierno de la UCD al anteponer los intereses de Andalucía a los suyos propios y los de su partido”.

“Se ha creado a lo largo de cuatro décadas, una narrativa en la que se miente sin pudor y no resiste a las hemerotecas, al principio intencionadamente, pero creo que a día de hoy ya es la pura ignorancia de la verdad” afirma tajante, al tiempo que en relación a Almería, destaca que “todo eso ha hecho un daño tremendo, como lo demuestra que aún hoy haya personas que usan aquel resultado para sostener que “Almería dijo no a estar en Andalucía”, cuando ni dijo no, ni era eso lo que se le preguntaba, ya que únicamente era la preferencia de acceso a la autonomía, nada más”.

Para concluir, y a modo de reflexión, sostiene que “cualquier otra solución que se hubiese dado al bloqueo autonómico distinta a la que hubo, hubiese sido perjudicial para Almería”.