De Aguadulce a Nueva York: el arte que nace en Almería y da la vuelta al mundo

La ciudad de Nueva York, precisamente Manhattan, fue la anfitriona de las últimas dos exposiciones de la artista argentina Ingrid Haubrich, quien lleva gran parte de su vida viviendo en Aguadulce. Allí nacen sus creaciones, que lleva al resto del mundo. Argentina, República Dominicana, Singapur, Malasia, Estados Unidos, Turquía o España, son simplemente algunos de los destinos, donde ya cuenta también con coleccionistas, galeristas y amantes de su obra.

La Galería del Consulado Argentino en Nueva York, inauguró el pasado jueves 5 de septiembre su exposición en solitario, 'CROSSINGS (Travesías)' de su Serie Mareas. El evento que contó con la presencia de la Delegada Cultural Noelia Dutrey, recibió la visita de amantes del arte, delegados culturales, coleccionistas y espectadores que no querían perderse la oportunidad de visitar su muestra, expuesta hasta el 27 de septiembre.

La exposición consta de 8 piezas de gran formato, junto a la presentación de unas nuevas esculturas volumétricas de pared realizadas en lienzo que fueron presentadas como primicia al público, marcada por una atractiva instalación lineal de lienzo suspendido intervenido e instalado por la artista, que ha captado la atención de todo visitante.

Haubrich, con su apasionante dominio del color y la textura, nos ha invitado a sumergirnos en un mundo donde el agua se convierte en protagonista y narradora. Los azules y celestes se entrelazan como olas en movimiento, mientras los blancos etéreos insinúan la espuma y la niebla. La artista logra capturar la delicadeza de una gota y la imponente fuerza de una tormenta marina, creando una danza visual que hipnotiza y emociona.

"Presentar Mareas en la Galería del Consulado Argentino en Nueva York me genera un puente emocional y sensorial entre Argentina y el mundo. Es una invitación a que la diáspora argentina y los amantes del arte global se sumerjan en una experiencia que me permite trascender fronteras", comenta Haubrich. Su obra se convierte en un lenguaje universal que celebra la belleza natural y enfatiza la necesidad de su conservación.

Con menos de 24 horas, casi paralelamente, la artista presentó otra de sus exposiciones en solitario titulada “APOTHEOSIC”, que se inauguró el viernes 6 de septiembre en un prestigioso Loft de la ciudad en el emblemático Soho, que fue cita obligada de amantes del arte, la moda y un público muy selecto que no quiso perderse esta exposición tan contemporánea, durante una de las semanas más concurridas de la ciudad, el comienzo de la Fashion Week, La exposición de 11 piezas de gran formato, marcada por una atractiva instalación de lienzo fruncido y cosido por la artista o una obra realizada con 10m de lienzo, que formaba un eje de circulación pudiendo observar la obra 360 grados.

"APOTHEOSIC no es meramente una exhibición; es un viaje a través de mi universo más personal, donde cada serie expuesta es un portal de simbolismo, vivencias y momentos importantes de mi carrera” señala Haubrich. La exposición reúne algunas de sus series más emblemáticas, como "Nightfalls”, "Gardens by the Bay" o “Mareas” que han sido presentadas en grandes ciudades como Madrid, Miami o Singapur, debido a su capacidad para conjugar el lirismo visual con una profunda reflexión sobre la naturaleza del ser y del espacio.

El Soho, con su rica historia como epicentro de la vanguardia artística, se erige como el escenario ideal para esta muestra. En este enclave, donde el arte y la cultura se entrelazan en una danza perpetua, "APOTHEOSIC" se presenta como una meditación sobre la creación, la transformación y la sublimación del arte en su forma más pura.

“Poder realizar estas dos muestras tan diferentes de una forma casi paralela, en esta maravillosa ciudad de Nueva York, teniendo tanta aceptación y contando con un público tan exquisito de coleccionistas o directivos de firmas como Calvin Klein, Dior, Louis Vuitton, L'oréal, Celine, o contar con patrocinadores como Chocolates Valor o Bodegas Escudero, solo me reafirma que todo nuestro trabajo va por buen camino”.

Para los conocedores y aficionados al arte, “CROSSINGS” o “APOTHEOSIC” son citas ineludibles, una oportunidad para adentrarse en la mente de una artista de arduo trabajo que aún tiene mucho por enseñarnos. Ingrid Haubrich reafirma su presencia en Nueva York, con estas dos exposiciones en solitario inauguradas, casi paralelamente en una de las ciudades más importantes del mundo para cualquier artista.