‘El Acebuche’ clausura su primera, pero no última, exposición pictórica

“Lo que hemos querido con esta iniciativa ha sido abrir la prisión al arte exterior, y también a la inversa, posibilitar que los internos tengan acceso a expresiones artísticas que se producen en el exterior”, Miguel Ángel de la Cruz, director del centro penitenciario ‘El Acebuche’, habla pausadamente mientras observa los cuadros que se exponen en las paredes de la sala. “Es decir, propiciar ese trasvase de información cultural, en el ámbito artístico”.
Varios grupos de internos y artistas recorren también la exposición y hacen grupos frente a las obras, comentándolas, conversando. Es el último día de la muestra ‘Arte tras las rejas’, que lleva abierta desde septiembre en una sala del centro, y que ha supuesto, sobre todo, el inicio de un proyecto cultural que buscará su continuidad en futuras iniciativas.
Colaboración altruista
“Queremos potenciar la expresión artística en la prisión, creando un espacio específico para organizar exposiciones durante todo el año”, afirma De la Cruz. Es decir, continuamente vamos a estar exponiendo, para un consumo de los propios internos, obras pictóricas, fotografía... Y quedan las puertas abiertas para otras iniciativas que nos planteen”.
En la muestra se exponen obras de los artistas Charo Sánchez, Alfonso Hervas, Rafael Vergel, Aurora Susino, García Prieto y Davidov Eugeniy. “El centro reconoce la altruista colaboración de estos pintores externos”, añade el director. “Y sobre todo a Charo, que ha sido la coordinadora, el alma de esta muestra. Están haciendo una labor social, en nuestra opinión, de extraordinaria importancia”.
Durante toda la mañana, diversos grupos de personas llegan hasta la sala. El montaje, surgido con motivo de la fiesta de La Merced, fue casi meteórico. “En dos días preparamos el local, pusimos las luces, todo”, sonríe De la Cruz. “Y ha quedado muy bien, pero ya verás cómo la vamos mejorando en los próximos proyectos”.
Formar parte de la sociedad
“Pienso que la vida penitenciaria no debe quedar al margen de la sociedad”, reflexiona, Luis Gámez, trabajador social y monitor. “El arte forma parte de la sociedad, de la cultura, de nuestra historia, y como tal los internos tienen que ser partícipes de ello. Además, deben servirle de inspiración, darle un aliciente a su vida. Y conocer, por supuesto, la obra de artistas consolidados, que vean que hay posibilidad de pintar, de hacer trabajos en distintas artes, porque también tenemos cerámica, otros talleres...”.
Charo Sánchez, por su parte, se multiplica entre los asistentes, respondiendo preguntas, comentando. En las paredes cuelgan varias de sus obras, en las que ha representado diferentes culturas. Al concluir esta muestra, ya piensa en la que le han propuesto para el próximo año. “La haremos distinta”, dice. “Incluso, intentaremos que sea con obras hechas especialmente para ella”.
Camino al andar
Davidov también tiene varias obras expuestas. Señala varios retratos, “una técnica que se me da muy bien”, reconoce. Hay, incluso, un retrato de Charo, y dos de su hija, que es Miss Almería. “Pero también tengo varias líneas que desarrollo: abstracto, cubismo... Espero evolucionar en todas”.
Los nombres de los artistas, reconocidos en el ámbito artístico, forman parte también ahora de la historia de una iniciativa cultural de innegable calado social. Esta, reitera Miguel Ángel de la Cruz, es la primera exposición. El comienzo de un camino por el que han apostado