Antonio López comienza su segundo curso en Olula rodeado de “amigos”

Antonio López comienza su segundo curso en Olula rodeado de “amigos”

Guillermo Mirón
21:03 • 03 jun. 2013

Unos 35 pintores llegados de diferentes partes del mundo comenzaron ayer a pintar sobre los lienzos del Curso de Realismo y Figuración que se desarrolla en el Museo Casa Ibáñez de Olula del Río por segundo año consecutivo. Tras ellos, observando atentamente la evolución de sus trabajos, no hay dos profesores cualquiera.  El maestro del realismo Antonio López (Tomelloso, 1936) es, de nuevo, el encargado de impartir este curso de la mano con Andrés García Ibáñez (Olula del Río, 1971).

Durante el acto de presentación que tuvo lugar ayer, el pintor y escultor manchego se situó a la misma altura que el resto de asistentes recordando que “todos son pintores” y que no se trata de gente “que sepa más o menos”. De igual modo, reconoció estar “ilusionado” por visitar una vez más el Almanzora y agradeció su esfuerzo a las instituciones que han hecho posible el curso, como son la Fundación Museo Casa Ibáñez y la Diputación, con la colaboración de Cosentino.

Trabajo y diálogo
“Trabajando vosotros y charlando todos juntos”, así resumía el pintor los pilares del curso que se desarrollará esta semana y que, al igual que en la pasada edición, no sólo estará enfocado a mejorar la técnica de los alumnos, sino que también habrá espacio para el debate y la reflexión. “Me siento entre amigos”, añadió.

El director del museo, Juan Manuel Martín, fue el encargado de abrir el acto, seguido por el presidente de la Mancomunidad del Almanzora, Antonio Salas, y el alcalde olulense, Antonio Martínez Pascual, que se deshicieron en elogios hacia Antonio López, quien escuchó atento sus intervenciones, al igual que la del diputado provincial Guillermo Casquet.

Por su parte, el artista olulense Andrés García Ibáñez aprovechó su intervención para anunciar una nueva colaboración del museo, en este caso con la Universidad de Granada, que dará una nueva dimensión académica a los cursos “muy pronto”. “La idea es que formen parte de una especie de máster que sirva para completar Bellas Artes y que sirva a los estudiantes para pintar junto a artistas que no pertenecemos al ámbito académico”.

Sobran los argumentos
“Antonio López es Antonio López”. Para Ángel, alumno del curso venido desde Chile, no son necesarios más argumentos para responder a la pregunta del por qué de su presencia en el museo teniendo en cuenta la distancia recorrida.

Los 35 asistentes tendrán de tiempo hasta este viernes para elaborar un bodegón o un desnudo siguiendo los consejos de García Ibáñez y de Antonio López. Será entonces, desde las siete y media de la tarde, cuando el pintor de Tomelloso ofrezca una charla abierta a todos los asistentes dentro de los actos de clausura, que promete ser la última clase magistral de este segundo curso que el reconocido artista imparte en tierras almerienses.







Temas relacionados

para ti

en destaque