Homenaje al primer santo almeriense

El Patio de Luces de la Diputación Provincial acoge desde ayer una exposición sobre la vida y obra de San José María Rubio, de cuyo nacimiento se cumplen 150 años en este 2014.

La muestra, titulada ‘San José María Rubio, santo de nuestra tierra’, permanecerá en la sede de la Diputación hasta el 23 de abril y acoge todo tipo de enseres personales, así como imágenes y citas reseñables de la vida de este santo almeriense canonizado por el Papa Juan Pablo II.

El presidente de la institución provincial, Gabriel Amat, que condujo un acto inaugural en la mañana de ayer, quiso reconocer como “un hombre ejemplar y extraordinario” al homenajeado. “Alguien que dio todo por los demás y lo hizo todo pensando siempre en los demás, sin pedir nunca nada a cambio”, elogió Amat.

Amat, además, mostró su orgullo por una persona que se convirtió en el primer santo nacido en Almería y al que, aunque desarrolló la mayor parte de su vida seglar en Madrid, “se le recuerda en su tierra con gran cariño”, apuntó el presidente.

Un gran almeriense
El presidente de la Hermandad de San José María Rubio, el padre Gabriel Lirola Aguilera, que a su vez es párroco del municipio de Dalías, se congratuló por el reconocimiento que se ha hecho desde la Diputación a San José María Rubio, “un almeriense universal que debe ser un modelo para todos”, destacó. 

Al respecto, repasó brevemente algunos aspectos de la vida del santo, nacido el 22 de julio de en 1864 en Dalías y que posteriormente estudió en los seminarios de Almería y de Granada para luego ejercer su labor pastoral en Madrid, con una vida dedicada a ayudar a los más pobres, como se refleja en la exposición.

Al término de la inauguración, la Hermandad hizo entrega a Gabriel Amat, como recuerdo, una imagen del santo, a quien a título póstumo en el año 2003 la Diputación le concedió la Medalla de Oro de la institución.