Héroes cotidianos en Londres: Antonio Lorente inaugura muestra en Camden Town

Supermán, el Capitán América y Wonder Woman miran al espectador desde los cuadros de Antonio Lorente (Almería, 1987). Sin embargo, sus rostros no son los que han popularizado los cómics y el cine. Tienen algo familiar, sus ojos desprenden complicidad, cercanía y un punto de inocencia. Esa es la propuesta de ‘I need a hero’, la segunda muestra individual del artista plástico que hoy inaugura en la galería Tower 47, en el barrio londinense de Camden Town. “Llevaba mucho tiempo queriendo hacer algo relacionado con superhéroes. Siempre me han gustado, aunque tampoco he sido nunca un devorador de cómics”, explica a LA VOZ Antonio Lorente desde Londres, donde reside desde hace dos años.

‘I need a hero’, formada por diez cuadros, busca reflejar cómo gente normal puede convertirse en grandes héroes. “Lejos de los músculos, chicas voluptuosas y poderes sobrenaturales, mis retratados son chicos y chicas normales (amigos, familiares, compañeros de trabajo...). Quería reflejar a gente de la calle de alguna manera disfrazada, sin poderes”, explica acerca de una propuesta realizada “con mucho cariño” que ha dado su fruto “gracias al trabajo duro”.

El nombre de la muestra coincide con uno de las canciones más conocidas de Bonnie Tyler. “Es un título que tuve claro desde el principio, sabía que se quedaría grabado en la memoria desde el primer momento. Además de dar mucho juego, le vino como anillo al dedo”, detalla.

En la obra de Antonio Lorente, lo clásico se reinterpreta desde una óptica contemporánea. Por eso, para la preparación de esta exposición buscó por ferias de segunda mano “marcos de estilo barroco” que contrastaran con su pintura. “Eso me llevó mucho tiempo, pero una vez finalizada la búsqueda todo quedó perfecto para ser expuesto”.

Destino Roma
Antonio Lorente llegó a Londres para aprender el idioma. “Vine sin nada a buscarme la vida para ganar en experiencia personal y mejorar mi inglés”, recuerda. En este tiempo, ha trabajado como ilustrador ‘freelance’, lo que le ha servido para “sobrevivir” en una ciudad “caótica”. “También tuve que buscarme un trabajo de media jornada para poder pagar los altísimos precios que tiene vivir en Londres. Así que mi primer año estuve centrado en el idioma y dejé mis encargos de ilustración para preparar la exposición y lograr una de las metas que tenía en este país. El segundo año todo empezó a tomar forma, conocí a gente, buenos diseñadores e ilustradores y me orientaron mucho. Conseguí hacer algunos diseños para empresas y gracias a eso pude encontrar un espacio para exponer mi trabajo”, detalla.

Su aventura londinense acabará en verano, cuando se desplace a Roma “el tiempo necesario para buscar una galería y exponer este trabajo”, adelanta. “Tengo buenos contactos y grandes amigos que me van a facilitar todo. No he cerrado el proyecto con ninguna galería pero hay varias interesadas. Una vez allí decidiré cuál puede ser la que adopte a mis pequeños héroes”.

Y en el horizonte, Almería, donde ya presentó su primera muestra individual, ‘Ilustres ilustrados’, en la Casa del Cine, espacio al que le gustaría regresar con ‘I need a hero’. “Querer exponer en Almería es una cuestión de orgullo. Tengo muchos paisanos que siguen mis trabajos a través de las redes y para mí es un placer compartir lo que hago en mi tierra. ¡Allí me siento más arropado