Una almeriense gana el concurso literario del Consorcio de Transportes de Sevilla

Es la historia de una amistad, la que une al pequeño Héctor y a un niño asiático que fabrica grullas con el billete del autobús. El primero se las guarda en el bolsillo para aumentar su particular colección sin saber que la razón de ser de esta afición papirofléxica tiene que ver con una antigua tradición china según la cual reunir mil de estas aves de papel permite pedir un deseo.

“Lo más emocionante de la historia es, sin duda, el deseo que decide pedir el pequeño Héctor”. La que así habla es Alicia Sánchez Romero, la joven almeriense que ha ganado la novena edición del concurso literario convocado por el Consorcio de Transporte Metropolitano del área de Sevilla con motivo de la Semana Europea de la Movilidad.

El cuento ‘La milésima grulla’ de esta estudiante de Periodismo y Comunicación Audiovisual se ha alzado con el primer premio del certamen, dotado con un tablet y un bonobús con una recarga de cien euros. “Ambas cosas me van a ser de gran ayuda en la universidad, sobre todo el bonobús, ya que vivo bastante alejada de mi facultad”, apunta.

Nacida en Almería en 1996, Alicia nunca había presentado públicamente sus escritos, lo que ha hecho que la sorpresa al escuchar el fallo del jurado haya sido “mayúscula”. “En vacaciones siempre me escapo a Sevilla a ver a familiares que viven aquí. Un día de este verano fui a la estación de autobuses Plaza de Armas y llamó mi atención un cartel en el que se informaba acerca de la novena edición de este concurso”, cuenta en una entrevista a LA VOZ.

Las mayores dificultades que presentaban las bases eran las relativas a la temática y a la extensión del relato. “Había ciertas reglas generales a seguir en cuanto a la presentación, pero sin duda las bases que determinaban el contenido y la extensión eran las más importantes: debíamos contar un relato cuya trama girara en torno al transporte colectivo o la bicicleta en no más de 500 palabras”, expresa la joven. 

Amante de la escritura
“Desde siempre me ha encantado escribir, pero es cierto que el detonante fue que una profesora de Primaria me dijera que el título de una redacción que había escrito sonaba muy periodístico. Al final esas pequeñas cosas marcan tu camino, como fue mi caso. Desde entonces me interesa el mundo del periodismo y aquí estoy, estudiando para dedicarme ‘al oficio más bonito del mundo’, como dijo Gabriel García Márquez”, explica Sánchez Romero. 

Como en su tierra no podía cumplir su sueño, la joven se vio obligada a desplazarse a Sevilla, donde finalmente optó por estudiar el doble grado en el que se combinaban las carreras de Periodismo y Comunicación Audiovisual.

Según relata, mucha gente le dice que hay tener valor para dedicarse a una de las profesiones más azotadas de los últimos tiempos y que se han transformado en un universo lleno de complicaciones. “Lo que ellos no saben es que los sueños son mucho más fuertes que estas adversidades”, confiesa segura.

Desde la distancia, Almería ha adquirido un significado mayor para Alicia. “Ahora guardo un concepto de mi tierra más dulce, más hogareño. A los significados de mar, diversión, luz, gente amable, alegría, cercanía y viento se unen otros como hogar, familia, infancia y amigos”.