Torres Jerez rememora su grave cogida de Perú

Eran las ocho y cuarto de la tarde del pasado miércoles cuando Torrres Jerez, con muletas y un evidente gesto de fatiga y dolor, ‘hizo el paseíllo’ por el pasillo central del salón de actos de la Casa de Las Mariposas.

El centenar de aficionados a los toros allí congregados prorrumpieron en aplausos, cual si de una salida por la Puerta Grande del coso de la Avenida de Vilchez se tratase. Que Torres Jerez y la afición de Almería ya saben lo que es eso.

El torero ganó con dificultades la mesa presidencial, en la que le acompañaron el maestro de la oratoria Gabriel Luis García, el comentarista de Canal Sur Laureano Fernández, su apoderado José Olivencia y el cirujano almeriense Doctor Diego Morata.

Nada más llegar de su odisea en Perú, Torres Jerez se puso en manos del prestigioso cirujano, quien aseguró que la segunda operación sí era la adecuada  y que las tres gravísimas heridas estaban correctamente intervenidas.

Puso el Doctor Morata un nudo en la garganta de todos al afirmar que por milímeros el cornalón, como él lo definió, no rompió la femoral. Y es que ya se lo dijo en Perú el Doctor Zambrano, quien le realizó la segunda operación: “Si te rompe la femoral, te mandamos a España en un cajón”. 

Torres Jerez fue desgranando la increíble odisea de las horas posteriores a la cogida en Cajabamba. “La plaza no tenía enferemería y me llevaron a un caserón cercano. El dolor erea desesperante y no había anestesia. Tres cuartos de hora tardó en llegar y yo perdí el sentido del insoportable dolor”.

El torero se emocionó relatando su amarga aventura. Y prosiguió: “Un médico me intervino pero aquello no mejoraba y la pierna derecha estaba cada vez peor. Quisieron trasladarme a Trujillo pero no había ambulancia. El alcalde me consiguió una, que tardó siete horas en recorrer los 12o kilómetros que separan Cajabamba de Trujillo”.

Una vez allí, ya fue correctamente intervenido por el Doctor Zambrano, quien le descubrió tres heridas por asta de toro, de las que sólo había sido operado de una.

Tras la amotiva narración de lo que había sucedido allí, el Doctor Morata aseguró que en tres semanas podría ir de nuevo al campo. Su apoderado, José Olivencia, afirmó su deseo de que Torres Jerez lidie seis toros en una plaza de categoría para el inicio de la próxima temporada. Y con esta buena nueva acabó el emotivo reencuentro.