La Villaespesa, tercera en préstamos en Andalucía

La Biblioteca Pública Francisco Villaespesa de Almería realizó en 2014 un total de 94.681 préstamos de libros y materiales en otros soportes, lo que la sitúa en el tercer puesto en cuanto a las cifras de préstamos por detrás de las bibliotecas provinciales de Sevilla y Granada. Según la Junta, con la expedición de 2.849 nuevos carnets, durante el pasado año se ha incrementado el número de usuarios inscritos hasta los 50.062 socios, 26.172 mujeres y 23.890 hombres.

El bibliográfico continúa siendo el soporte mayoritario con 55.993 libros prestados, seguidos de otros materiales como los audiovisuales, con 32.431 préstamos, los sonoros (5.179) o los libros electrónicos (1.001). En 2014, la Junta ha incorporado 5.311monografías a los fondos de la biblioteca que cuenta con 140.444 libros. 

A lo largo del año pasado, 239.435 personas, tanto socios como usuarios sin carnet, visitaron las instalaciones de la Biblioteca Villaespesa. Las fechas que concentraron más visitantes fueron los meses de enero con 27.813, mayo con 24.930 y noviembre (24.129), mientras que en julio y agosto el número de visitas descendió hasta las 11.647 y 11.000, respectivamente. La Biblioteca dispone de una web, de un blog del club de lectura y, desde finales de 2012, está presente en Youtube y en las redes sociales Twitter y Facebook, con 5.978 seguidores.

Junto a las prestaciones y servicios habituales de una biblioteca, la Villaespesa ofrece exposiciones, encuentros con autores, ciclos de cine, visitas guiadas, cuentacuentos y teatro para niños, talleres infantiles, conferencias, recitales poéticos, y la celebración del Día del Libro (23 de abril) y del Día de la Biblioteca (24 de octubre), entre otras actividades culturales y de fomento de la lectura. El año pasado albergó un total de 364 actividades.

En un comunicado, la delegada de Educación, Cultura y Deporte, Isabel Arévalo, se ha referido a la adaptación de la Villaespesa al nuevo concepto de biblioteca, que “ha ampliado sus funciones, más allá de la tradicional de préstamo de libros, hasta convertirse en un centro cultural que busca la participación ciudadana, se adapta a los nuevos soportes bibliográficos y usa las últimas tecnologías de la comunicación”.