Pescadería, con su Virgen. Tras procesionar por el barrio, la Virgen recorrió la bahía en barco

Cuarenta grados marcaba el termómetro de una cercana farmacia cuando a las 18.15 horas las puertas del templo de San Roque se abrieron y dejaron ver la Cruz Guía de la procesión de la Virgen del Carmen de Pescadería. Todo el barrio desafiaba el tórrido calor para acompañar por las calles del barrio a su Virgen más marinera.

Presidían el cortejo la presidenta de la Agrupación de Cofradías, Encani Molina, el presidente de la comisión gestora de la Hermandad, José Luis Cantón, el consiliario y párroco de San Roque, Javier González, el comanadante naval de Almería, Blas Romero, y los concejales Ana Labella, Lola de Haro y Manuel Guzmán. La banda de música ‘Los Iris’ de Instinción ponía los sones musicales al cortejo procesional.

Tras recorrer las zigzague-antes y estrechas calles de Pescadería, en las que recibió varias petaladas, la procesión cruzó la antigua N-340 y se dirigió al Puerto.

Ante el caserón de la Junta de Obras del Puerto, la Hermandad depositó una ofrenda floral ante el monumento allí erigido en homenaje a los pescadores que perdieron la vida en el naufragio del 15 de febrero de 1971, algunos de ellos hermanos de la Virgen del Carmen.

Ya sin más paradas, y en estilo romería, la Virgen llegó a la dársena en la que la esperaba el barco ‘Alvaluc II’ al que le cupo el honor de albergar a la patrona de los pescadores y realizar la procesión marinera seguida de numerosos barcos de pescadores de la zona. Tras una hora, de nuevo a tierra para regresar a su templo parroquial de San Roque.