Un libro para amar y conocer Almería desde la infancia

Indalo, Rosita y el gatico Chocolate enseñan historia y tradiciones en ‘Almería para niños’

Jesús Muñoz muestra ‘Almería para niños’ en la sección infantil de Orión.
Jesús Muñoz muestra ‘Almería para niños’ en la sección infantil de Orión.
Marta Rodríguez
01:00 • 17 nov. 2015

Indalo viste zaragüeles y Rosita refajo. Son dos personajes de literatura infantil muy almerienses que, acompañados por su gatico Chocolate -en alusión a los dulces de este nombre-, se han propuesto que los niños conozcan y amen su tierra. Para ello, los guiarán en un viaje imaginario por la provincia en el que aprenderán sus particularidades sin levantar la vista de las páginas de un libro.




‘Almería para niños’ (Círculo Rojo, 2015) es el segundo título de Jesús Muñoz. Después de ‘Almería con otra mirada’ -una guía para conocer la ciudad como te la enseñaría un amigo-, el escritor ha querido plasmar de nuevo el cariño que siente por la provincia en una publicación que esta vez está pensada para los pequeños de la casa. 




“En el colegio, en su día a día, los niños reciben otro tipo de información, pero no conocen su propia tierra. Yo creo que los almerienses adolecemos de eso, a alguien de Adra le preguntas por Los Vélez y le parece que le hablas de un lugar de otro planeta, igual que si a uno de la capital le cuestionas acerca de Fiñana. Y pienso que esta obra puede ayudar a hacer provincia y a que desde la infancia se empiecen a interesar por Almería”, apunta el autor en una entrevista a LA VOZ.




Dirigido a pequeños que todavía no saben leer y que pueden verlo junto a sus padres y a los que ya están empezando a hacerlo (hasta 9 años), el volumen se detiene en aspectos como la historia, la geografía, la naturaleza, las tradiciones, la gastronomía y el folclore.




Además de conocer a las civilizaciones que han dejado huella en su tierra, gracias a este proyecto los niños aprenderán a situar las comarcas de Almería y su cumbre más alta: El Chullo, en Sierra Nevada.
Con textos de Jesús Muñoz e ilustraciones del madrileño Fernando Cuevas Bautista, ‘Almería para niños’ puede utilizarse en las aulas e incluye un cuestionario final para aprender de padres y abuelos.




Gira provincial
En su gira almeriense, Indalo y Rosita visitan las canteras de la Sierra de Filabres y los invernaderos del Poniente para familiarizar a sus amigos lectores con dos de las principales actividades económicas de la provincia. También se dan un chapuzón en las playas del Parque Natural de Cabo de Gata-Níjar y hacen de figurantes en el rodaje de una superproducción de Hollywood en los poblados del oeste de Tabernas. 




“Una parte que puede ser interesante es en la que hablo de gastronomía almeriense con platos típicos de la provincia, que es una cocina que se está perdiendo. Todos recurrimos a las migas para cuando llueve, pero hay otros muchos como las gachas o el trigo”, señala Jesús Muñoz.




Llaman, asimismo, la atención las páginas dedicadas a la fauna autóctona con vacas almanzoreñas o el fartet, “pez que sólo existe en las albuferas de Adra y Valencia”.


Aunque este libro es un proyecto personal, el escritor no ha dejado pasar la oportunidad de recoger algunas de las tradiciones que reivindica en su faceta de presidente de Acción por Almería, como la recuperación de los cantes del Levante y el uso de la indumentaria típica. “Los niños descubrirán palabras que pronunciaban sus abuelos como ‘présules’ para referirse a los guisantes y ‘panizo’ en lugar de maíz”, destaca.


También hay hueco para ensalzar a almerienses ilustres (el maestro Padilla y Antonio de Torres) y reclamar el origen local de leyendas como la del hombre del saco.


Un título con enfoque didáctico que podría tener continuación
‘Almería para niños’, que se presentará el 2 de diciembre en la UNED, tiene vocación didáctica. Su autor, Jesús Muñoz, se ha esforzado por utilizar un lenguaje comprensible sin caer en la simpleza. “La idea es que los pequeños aprendan, así que no está de más que pregunten algún significado a sus padres”, asegura.


Al final de la publicación, ha incluido un pequeño cuestionario preguntando al lector por su localidad, su monumento más representativo y su personaje más ilustre en un intento de suscitar la curiosidad por el entorno. 


“Si el libro funciona como espero, Indalo y Rosita podrían seguir sus aventuras”, avanza.



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