Mirando al mar soñé

Ellos se lo habrán dicho en la intimidad, pero nada ha salido a la luz pública. Ellos saben dónde está el error, pero no lo van a pregonar, y ellos llevan seis meses buscando a un Almería que no aparece.

A Alfonso García y a Alberto Benito el fútbol les volvía a dar una oportunidad y no la han sabido aprovechar. Fiaron todo a un entrenador y la opercaión salió rana. Confiaron todo a Sergi y no fue capaz de arrancar la moto.

Nadie lo podía imaginar y todo lo que se diga es poco, aunque me gustaría que miraran al mar, como dice la canción, y que sueñen con lo que pudo haber sido y no fue.

Se nos ponen los dientes largos cuando vemos esos llenos en Pamplona, Vitoria, Oviedo... equipos a los que miramos por encima del hombro amparados en nuestros Eldin, Montoros y Chulis varios.

Dejamos pasar muchas buenas oportunidades de firmar jugadores de otros perfil que eran ofrecidos al Almería y más baratos que los que tenemos.

El presidente y Benito hicieron lo que debían en aquel momento y volvieron a repetir con Pipo Goro firmando a los jugadores que el argentino les pedía. De cuatro refuerzos, a día de hoy, solo uno apunta maneras y volvemos a caer en la tentación.

Vale que Uche no ha venido por Goro, pero sí lo han traído Alfonso y Benito. 

Algo tienen que cambiar estos hombres que firman a los jugadores, para que no se repitan los errores que cuestan primero mucho dinero y segundo te pueden costar perder la Liga Profesional.

Todos sabemos que el hombre suele tropezar con la misma piedra y en esta ocasión va en plural porque Alfonso y Benito no firmaron ni al organizador ni al delantero centro que pedía la grada a gritos en Navidad y han mantenido su media de errores de principio de temporada.

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