Esto no es el mundo del motor, es voleibol, pero la versatilidad de esos vehículos que se atreven en todo tipo de condiciones sí es la propia del ramillete de grandes jugadores con el que el tricampeón ha tocado a la puerta de la undécima Copa del Rey y la duodécima Superliga. El cortejo con los títulos seguirá un año más, en un 2017 que ilusiona a los cuatro efectivos de la posición cuatro de Unicaja Almería, hombres que defienden y atacan a partes iguales y cuyo primer ‘obstáculo’ en el camino es hacerse con un hueco en el equipo titular. Si en los ahorradores se habla de ‘calidad en el entrenamiento’, como ha sucedido en varias veces para dar una explicación a los éxitos, el puesto de receptor es un claro ejemplo de ello.
Hay una frase que resume todo: “Tanto Israel, como Mario, como también Juanmi me ayudan mucho a mejorar en aspectos técnicos que pensamos que tengo que pulir”. La pronuncia Arabisen Rodríguez, el último en llegar a la disciplina verde y el más joven del selecto grupo de receptores. Es el que menos puntos ha jugado, pero “eso no es síntoma de venirse abajo, sino que lo que hay que hacer es seguir trabajando y entrenando porque a todo el mundo le llega su hora”. Hay una gran competitividad por dos plazas entre cuatro grandes jugadores, algo que los hace más grandes no solo por elevar el nivel sino como compañeros. “En 2017, con la armonía entre nosotros vamos a conseguir muchas cosas”, dice Israel Rodríguez.
Lo que hay en común entre estos jugadores, además de los quilates de su vóley, es que todos tienen muy bien amueblada la cabeza. Otra muestra de ello es la reflexión del también joven pero curtido Juanmi González, felizmente recuperado para el deporte de élite: “La lesión es un tema que nunca se olvida, sino que se tiene que tener presente, que te hace abrir los ojos y ver lo que te puede pasar en un instante, un día ser un jugador promesa que puede llegar a ser ‘equis’ y al día siguiente puedes no ser nadie y tener que dejar de jugar, que es lo que estuve a punto de hacer yo, así que la lesión no se olvida y sirve más para aprender que para quejarse”. Más conciencia de la realidad no se puede tener.
En cuanto a Mario Ferrera, tres cuartos de lo mismo sobre una mentalidad fuerte que le ha llevado a ser fundamental en varios de los títulos de Unicaja: “Estoy más que acostumbrado a este nivel, llevo diez años aquí y siempre rodeado de gente muy buena, así que sé jugar un poco de esta manera, a buscar un sitio, y estoy seguro de que 2017 va a ir muy bien e intentaré estar más fuerte para jugar más”. O de inicio o entrando desde el banquillo, el sevillano es un seguro y lo ha demostrado en “un 2016 que pocas veces se va a repetir, si no nunca, será muy complicado, un año bastante bueno y esperemos que 2017 sea la mitad”. La ambición está intacta, como no, y queda todavía mucho por delante, envuelto en ilusión y compromiso.
Así lo reconoce Arabisen, único de los cuatro que no ha abierto su palmarés: “A 2017 le pido ganar mis dos primeros títulos ya, además de mucha salud y que el equipo le dé confianza a los jóvenes para salir a jugar y aportar mucho más en los partidos”. Todos quieren estar en pista, como manifiesta Ferrera: “Yo he perdido bastante y he ganado bastante también en este tiempo, es mejor lo segundo, claro, y es una de las cosas que pedimos, que venga algún título para el grupo; en cuanto a lo individual, intentar mejorar lo máximo posible para jugar más, que es lo que quiere cada jugador y yo también”. Todos buscan su mejor versión, como Juanmi: “Espero no estar aún en mi máximo nivel y seguir aumentándolo más, progresando y aprendiendo en este gran club”.
De un modo similar se expresa Israel: “Quizá me hubiera gustado aportar un poco más al equipo esta primera vuelta, por la lesión en la espalda y la semana de la gripe, así que es una pena que se pare ahora porque es cuando me encuentro mejor físicamente, pero esperemos estar al máximo nivel para lo que queda de temporada”. Juanmi González es igualmente ambicioso: “A 2017 le pido títulos y mínimo que sea como 2016, que podamos seguir siendo el club más importante de España, espero de verdad que sea igual porque se ve en los resultados que hemos hecho un grandísimo trabajo, así que deseo que sigamos en esa línea y acumulando el mínimo número de puntos en contra”. En fase regular y media, una derrota, y lo demás, victorias.
Haber perdido la Supercopa no empaña nada a 2016: “Tuvimos el título bastante cerca pero no pudo ser, Teruel jugó un buen partido, pero al sacar conclusiones del año hay que decir que fue un año bastante bueno y esperemos que el próximo sea la mitad y con ello me conformo, hay que estar en las finales y después se verá cómo se juegan y cómo vienen las cosas”. A esto dicho por Ferrera se suma lo comentado por su paisano Israel Rodríguez: “Muy buenas sensaciones, una pena la Supercopa, ya que levantamos un partido que teníamos casi perdido, tuvimos ahí el tie-break y al final se escapó, pero un balance muy bueno de una primera vuelta sin derrotas a falta de un encuentro, por lo que veo un comienzo de temporada muy esperanzador”.
En cuanto a Arabisen, se siente cada vez más integrado y su referencia al título que se fue es igualmente la de construir sobre ello: “Mi sensación es la de estar medianamente acoplado en un equipo de títulos, que opta a jugar finales; se nos escapó la Supercopa por poco, empezamos de menos a más y supimos controlar el partido, pero no cayó de nuestra parte; de todos modos estoy contento con el progreso tanto mío como del equipo, y se nota que va a afianzando conforme avanzan las jornadas, así que satisfecho con el trabajo tanto físico como técnico”. Para Juanmi, “2016 podría haber acabado incluso mejor por la Supercopa, pero ha sido un gran año; siempre que hay una mejora se tiene una sensación buena”.
Al onubense no le cabe otra cosa que satisfacción, pero junto a la autoexigencia: “Hemos ganado más de lo que hemos perdido tanto con la Selección como con Unicaja, así que estoy muy satisfecho y los resultados dicen que hacemos un gran trabajo y las cosas muy bien en los entrenamientos”. Respecto a repetir con España, “que toda pérdida de vacaciones signifique que estamos donde tenemos que estar, en las competiciones duras y buenas”. Juanmi ‘no tuvo verano’ y desea seguir así este año en un Campeonato de Europa en Polonia que no se pasa por la cabeza de Israel Rodríguez: “Creo que hice todo lo que tuve que hacer con la Selección, que ahora está en un cambio y le toca a los más jóvenes”.
El sevillano lo tiene muy claro: “Mi momento ya pasó, hicimos historia y será muy complicado de repetir, así que ahora me centro en Unicaja, que es donde estoy a gusto, y quiero conseguir lo dos títulos que nos quedan”. Será con la ayuda de todos y el camino se está andando: “La evolución del equipo está siendo muy buena, hemos trabajado muy bien y tanto en la Supercopa como en los momentos más difíciles el bloque ha sabido responder genial; eso es importante para lo que viene, la Copa del Rey y los play off”. La palabra ‘equipo’ es fundamental: “En este deporte individualmente pocas veces se gana, y está claro que jugando como en Soria, partido muy serio de todos, efectivo y con pocos errores, vamos bien”.
El equilibrio entre lo particular y lo colectivo se ve reflejado en la posición de más competencia por un puesto, todos ambiciosos y todos comprometidos con el bien del club: “Además de los títulos que nos quedan, sobre todo pido salud tanto para los compañeros como para la familia y con eso es suficiente”. De lo dicho por Israel Rodríguez, el más veterano, a lo expresado por Arabisen Rodríguez, el más joven: “Por supuesto que me siento capacitado para estar aquí; sea en un partido o en un entrenamiento, si yo veo que el entrenador confía en mi, voy a sentirme cómodo y a pensar que es mi momento y que lo voy a hacer lo mejor posible”. El canario se siente “muy bien acogido, bien físicamente y la ciudad, pese a que ha llovido mucho –risas-, acompaña bastante”.
Consulte el artículo online actualizado en nuestra página web:
https://www.lavozdealmeria.com/noticia/6/deportes/120131/4x4-en-el-unicaja