Punto y final

Opinión: Cuando el presidente del Almería dice que “la tranquilidad es relativa” hay que estar preparados para lo que pueda pasar. Es decir, puede pasar de todo. Ha pasado.

El presidente dejaba claro que Soriano será un hombre de club por lo que si llega el cese lo mejor sería hacerlo director deportivo y que pase a dirigir a Andrés Fernández y a Ángel Luis Catalina: sus adosados.

Soriano director deportivo y que sea él quien elija al nuevo entrenador del Almería. Seguro que conoce a uno bueno para que ponga al equipo donde todos queremos.

Trabajar junto a Soriano será un lujo para el nuevo entrenador que deberá ser de plena confianza para el mañico y a día de hoy solo se me ocurre que tire de la experiencia de Paco Flores el mismo que lo fichó para el Almería: amor con amor se paga.

Sea Flores el elegido o se apueste por otro lo mejor es que el nuevo entrenador, sea de la confianza de Soriano porque si no lo es empezamos mal. O mejor dicho esto acabaría fatal. Peor que está.

No sé las ganas que tendrá Soriano de dar un paso atrás y poner a otro en su lugar. Creo que pocas y si el que viene arranca la moto ya me contarán como quedaría el mañico.

Alfonso García deberá gestionar bien esa transición en el Almería porque cualquier movimiento tiene que ser positivo. El equipo está cogido con pinzas y no hay margen de error.

Me cuesta ver a Soriano de director y fichando un nuevo entrenador pero es a lo que estamos abocados si se cumple lo pactado entre Alfonso y su entrenador: “Pase lo que pase Soriano seguirá en el Almería”, dejaba claro el presidente.

Con la llegada de refuerzos a Soriano no le quedaba otra que sumar. No son solo pequeños detalles. El Almería no tiene ni los mínimos mecanismos exigidos a un equipo de la Liga Profesional.

Alfonso debe de ponérselo fácil a Soriano y darle protagonismo a la hora de elegir su sustituto.