Son 15 finales en casa

Si algo me tranquiliza con la llegada del nuevo entrenador es que las 15 jornadas que quedan son en casa. Habrá partidos lejos del Mediterráneo pero la solución la tiene dentro.

El primero de los partidos como el último se llama vestuario y es más complicado que ganar en Lugo o en el Ciutat de Valencia. Por mucho que digan los futbolistas el vestuario no esta sano y es la causa de todos los males.

Me consta que lo intentaron desde Juan Ignacio Martínez JIM hasta Soriano y no hay manera. Los grupos siguen siendo el denominador común y la plantilla del Almería llegando a los campos es como el Tour de Francia cuando llega a una rotonda: todos en fila india.

Alfonso tiene que acertar con el entrenador que deberá ser buen motivador para que salgan al campo a competir unidos y no cada uno a su bola. Soriano no me hizo caso y no habló con cada uno de los jugadores sabiendo (como nadie) que el vestuario estaba roto.

El vestuario es la clave del éxito y tengo claro que Soriano no era santo de la devoción de muchos de los 15 con contrato y de algunos de los que llegaron. No supo atajar el problema. No supo unirlos en una idea.

El primer paso lo tiene que dar el director deportivo ofreciendo una PRIMA DE PERMANENCIA porque el dinero une voluntades (que nadie se ofenda) y por aquí empieza el cambio. Y ya pagará el inglés el vino que se bebió.

Conocida la cifra hablar hasta aburrir a las ovejas con los jugadores y unirlos. Lavarles el coco como dicen los más jóvenes y ponerlos como motos. De la cabeza a los pies.

El nuevo entrenador sabe que tiene que trabajar tácticamente y enseñar sus mecanismos de juego pero más importante será que tengan la cabeza en la causa: enchufados.

Me tranquiliza que el mal está dentro. Estoy convencido de que estos futbolistas pueden ganar 8 partidos de 15 y salvar la categoría. Totalmente convencido.

Pero no se olviden que cada jornada el Almería nuevo tendrá que ganar al de Soriano para vencer. No queda otra. No hay otro camino. Estamos en manos de los futbolistas.

Está todo inventado.