Las rotaciones tientan a Molducci en la recta final

Tras la vuelta de Sevilla el lunes de descanso no fue tal, puesto que siete de los efectivos del plantel ahorrador se vieron afectados por una incómoda dolencia en el estómago que acabó con varios de ellos en urgencias. Pasando los días se ha ido recuperando el tono físico de manera paulatina, pero es evidente que a Piero Molducci no le puede satisfacer la semana de trabajo: “Hemos tenido un montón de problemas porque todavía –jueves a primera hora- no ha entrenado el equipo dadas las muchas bajas por un trastorno intestinal de siete u ocho jugadores”. El ‘reagrupamiento’ se ha producido dos días antes de un partido que el técnico no ha dudado en definir como “bastante difícil porque Soria es buen equipo”.

Con claro sabor a clásico, la rivalidad siempre es manifiesta entre ambos rivales y al italiano le gusta: “El primer año de mi vuelta aquí, 2012, en semifinales con Soria ganamos 3-2, histórico, y siempre es un clásico, siempre es un equipo peligroso, con jugadores expertos, que no falla mucho, tiene una buena técnica… bueno en definitiva”. Además, ha fichado con criterio y sus jóvenes son talentosos, como la pareja de franceses de ‘reparto y pegada’: “Tienen un colocador bueno –Jean Oriol-, un opuesto joven, pero un buen opuesto –Julien Winkelmuller-… es buen equipo, insisto, y ha hecho buena temporada”. Pese a ello, y miradas todas las opciones, es muy probable que se introduzcan cambios en el equipo verde.

Y es que ante la pregunta de si elige o no rival, la respuesta es rotunda: “No”. Sí que los sigue de cerca, y se queda con que “Teruel últimamente ha rotado mucho al equipo, ha perdido puntos contra Barcelona y contra Santander por eso”. En ese

sentido añade un matiz importante: “Ahora miramos si rotamos nosotros, lo que hacemos aquí y lo que haremos en Teruel –en la última jornada de la fase regular”. También tiene claro que para semifinales “los posibles cruces son dos, o Teruel o Ibiza”. No existe preferencia por ninguno: “Son dos equipos como nosotros y como Palma, somos cuatro que peleamos siempre, uno gana, el otro pierde, otra vez al revés… es lo que sucede normalmente”.

A Molducci también le ha llegado eso de que “Teruel en el último momento no quiere jugar con Palma”, pero no se pronuncia: “Ahora no sé que quiere hacer”. En sus cuentas puede pasar de todo: “Con Teruel hemos perdido y ganado y con Ibiza hemos ganado siempre, pero el play off es diferente, se juegan dos partidos en dos días, o dentro o fuera, no hay una clasificación y por eso debes jugar bien estos dos partidos y el otro dos también; no elijo a nadie”. Tampoco le sirve la fase regular tan extraordinaria que ha firmado Unicaja: “Pienso que tenemos un equipo más regular, que no pierde con Barcelona, con Vecindario… que no pierde partidos fuera que otros sí han perdido, la diferencia es esta”.

Alemão

Pero “después en un partido directo cambia todo, debes jugar bien ese partido”. Es lo mismo que piensa Alexander Szot ‘Alemão’, que lo ha acompañado en la rueda de prensa previa a un choque que el brasileño también sabe que es un clásico: “En el primer partido no tenían algunos jugadores, ahora viene con el equipo completo y nosotros tenemos la tranquilidad de que somos los primeros”. El brasileño no quiere romper la última estadística: “No sé cuánto hace que Soria no gana a Unicaja aquí en nuestra casa, y no quiero que sea este año conmigo en la cancha”. Respecto a jugar mejor los choques directos, el brasileño es exigente: “Hemos perdido con los dos rivales de posible semifinal y final”.

‘Alemão’ se siente ya totalmente “climatizado a jugar en invierno y a cumplir con una planificación dura durante todo el año”. Ha sido extraño para él la disputa de dos títulos entre medias: “Hemos tenido las copas, que son partidos decisivos que no estaba acostumbrado a jugar durante la temporada regular”. Eso de final y semifinal en el momento del calendario español no le ha permitido sentirse cómodo, pero ahora cambia todo: “Estamos llegando al momento decisivo y sí estoy acostumbrado, porque voy a jugar al final de la temporada los partidos más importantes, así que al máximo de motivación para que todos esos meses que hemos trabajado se vean reflejados”.

Ha mejorado mucho su español, “no hay otro modo”, y aplica el refrán ‘a la tercera va la vencida’: “Vamos a por la Superliga, me gustaría haber llegado a la final de la Copa del Rey, pero me gusta más esto porque hemos hecho una liga muy buena, no hemos perdido partidos fáciles, pero con rivales directos sí, con los dos que podemos ver en semifinal y final, así que tenemos que estar atentos”. Es cierto que “no es solo un partido sino al mejor de tres y se tiene el factor cancha, se tiene a la afición”, pero eso no le vale: “Si un partido no va bien hay que recuperarse rápido porque no hay tiempo; para salir campeón, independientemente de con quién juguemos, tenemos que sacar estos siete meses”.

Su referida aclimatación se ha producido no solo al estilo de vida y la dinámica del equipo, sino también al ‘modo de vóley’, que le ha hecho ser más completo: “He escuchado mucho respecto al bloqueo; es una dificultad que yo tengo porque nuestra escuela es diferente de la de aquí y se tiene que trabajar de una manera específica; me gusta más atacar, y sacar me gusta mucho, pero se tiene que ser completo, hacer de todo, ayudar al equipo y si estoy haciendo bien los tres mejor, mejor”. Suma también puntos de bloqueo. Por último, no elige rival: “Teruel e Ibiza tienen las mismas cualidades, creo que no hay distinción entre los dos, y creo que lo principal es tener más concentración fuera para poner un pie en la final”.