El ADN Alfaro ha llegado al Mirandés. Aquel férreo central del Sevilla, ahora en los banquillos, transmite a sus futbolistas la garra necesaria para pelear hasta el último minuto del último partido, a pesar de que el descenso llama a la puerta de Anduva. A siete puntos de la permanencia, quedando nueve en juego minimiza las posibilidades rojillas, aunque el técnico recuerda que no vienen de paseo al Mediterráneo: “Vamos a Almería a por los tres puntos. Nos enfrentamos a un gran equipo, con una plantilla hecha para subir, pero con las mismas urgencias que nosotros”.
Con 37 puntos, el Mirandés es el colista de Segunda, si bien en las últimas jornadas ha empezado a remontar el vuelo. Pablo Alfaro se muestra orgulloso con su vestuario: “No podemos jugar con las armas que no tenemos. Tendremos empuje, garra y amor propio, además de buen fútbol. Casi nunca nos encerramos y atacamos con bastantes efectivos”.
El Almería
Nadie esperaba ver a los rojiblancos luchando por la salvación a tenor de la plantilla formada por Alfonso García en verano. Pablo Alfaro no se desmarca de esa línea y elogia el trabajo de su rival: “Es un club que viene de Primera y con una gestión presidencial que ha llevado al Almería a grandes cotas. Presupuestariamente nos superan, pero vamos a luchar porque los dos estamos abajo y no hay margen de error”.
Reacción
La llegada de Luis Miguel Ramis al banquillo, previo paso de Fran Fernández, reactivó a un equipo con problemas de personalidad arrastrados de la etapa de Fernando Soriano. El Mirandés quiere jugar con la ansiedad rojiblanca: “Soriano no terminó de dar con la tecla de los marcadores y Segunda es una trituradora de entrenadores. Con Ramis no cambió mucho el estilo, pero suma más”. No espera que el intenso calor -se esperan más de 30 grados- afecte a sus futbolistas: “Nos adaptaremos”.
Sonido SER: Pablo Alfaro, técnico del Mirandés.
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