Protestado arbitraje

Lo que fue un comienzo cómodo y sosegado para el manchego Díaz de Mera Escuderos, se fue agitando conforme pasaban los minutos porque la parroquia local entendió que en varias de sus decisiones perjudicó a su equipo. Así en el minuto 30 se produce un claro empujón de Pina a Caballero cuando éste iba a cabecear al que el trencilla aplicó ese extraño criterio de ‘no ser suficiente’, cuando empujar está expresamente prohibido en el reglamento. ¿Hubiera pitado golpe directo si el empujón lo hubiera dado Caballero sobre Pina? Seguro que sí.
En la segunda mitad del partido en el Estadio, momentos antes del primer gol, Fidel era derribado dentro del área lorquina y el colegiado dejó seguir la acción entre las protestas del respetable.
Mostró una amarilla absurda a René, por sacar sin que pitara, pero legal.
Incomprensiblemente alargó 4 minutos que acabaron siendo cinco.