La historia de David Querol (Reus, 1988) y René Román (El Bosque, 1983) responde al increíble argumento de cómo dos personas de carácter opuesto comulgan hasta crear una amistad sin fisuras. Ni siquiera el tiempo y la distancia han podido borrarla. Los dos personajes mantienen un hilo conductor innegociable; el fútbol. Se conocieron en aquel Llagostera que sorprendió por un ingreso al fútbol profesional sin precedentes. Querol y René firmaron contrato el mismo verano (2014), aunque curiosamente tardaron en conectar.
El portero gaditano, del perfil de Edgar Badia, no muy alto, de grandes reflejos y virtuoso para interpretar y comprometerse con el juego, va por la vida abrazado a la discreción. De temperamento tranquilo, invierte su tiempo libre en funciones caseras. Se topó, eso sí, con la energía de Querol, todo lo contrario que él. Alegre, inquieto, dispuesto siempre al disfrute. Aunque la relación demoró su punto álgido, la insistencia del reusense para unir en la convivencia a René resultó. Existe otro mosquetero que completa el trío. Con Jesús Imaz compartieron bromas y experiencia vital en Palamós, lugar de residencia en la aventura de Llagostera.
El feeling entre los dos futbolistas fluyó ya en la segunda temporada. Querol no salía de casa de René. Las timbas al FIFA generaron un antes y un después. Celebraban los goles casi más que en el mismo césped del municipal de Palamós. Tirados en el suelo, con piques bromistas sin contemplaciones. Ocurría algo parecido en las partidas de pádel en las que no sólo había en juego el orgullo. Comidas y cenas de fino paladar provocaban máxima atención de los socios. No querían perder ni a las chapas.
Llagostera significó un impulso futbolístico indiscutible para los dos y eso que no evitaron el descenso del equipo a Segunda B. En junio de 2016, René Román encontró refugio muy cerca de Palamós, concretamente en Girona, donde vivió un ascenso a Primera inolvidable. Aportó 22 apariciones y se colocó en el escaparate elegido de Segunda División. Mientras, Querol regresó a casa como buque insignia de su Reus. Los caminos opuestos, eso sí, no quebraron la amistad. David y René hablan a diario. Incluso se han visto las caras en el campo.
Ocurrió un 12 de marzo de 2017, en el mismo Estadi. René fue elegido por Machín como arquero titular del Girona. Querol ingresó ante los ojos de su amigo en el minuto 70. Ganó el Girona 1-2, aunque adivinen quién anotó el gol rojinegro. David, de media volea, sorprendió a su René. Instantes antes, éste, en pleno juego le lanzó algún que otro mensaje. “No te tires más, anda”. Todo quedó ahí. La guasa desde entonces no ha cesado. El Whatsapp suele convertirse en el principal instrumento comunicativo. Cada vez que Querol falla una ocasión recibe un mensaje de su colega, con vídeo o imagen incluidos. “Sólo me marcas a mí”.
Este domingo, el estadio de los Juegos Mediterráneos de Almería va a albergar un nuevo encuentro entre dos amigos a los que sólo el fútbol va a enfrentar durante 90 minutos. René Román se desvinculó del Girona para convertirse en el portero titular del Almería, donde no ha soltado el arco hasta el momento. David Querol ha empezado a asomar la cabeza en los planes de Garai en las últimas semanas, después de superar varios problemas físicos. El duelo está servido. También ese morbillo entre hermanos.
La última vez que se vieron data de agosto, con la visita del Almería al Nou Estadi de Tarragona, en la primera fecha del campeonato. Compartieron unas horas de confidencias y risas, también algún que otro desafío con la mirada puesta en el domingo. Los caprichos del fútbol dicen que Almería y Reus llegan a la cita con los mismos puntos, 12, y en una situación casi idéntica. En todo caso, la tradición almeriense le obliga a exponer más. El espectáculo anda asegurado.
Consulte el artículo online actualizado en nuestra página web:
https://www.lavozdealmeria.com/noticia/6/deportes/139852/david-querol-y-rene-amigos-enfrentados